Junta Nacional realiza catastro de daños a Cuarteles de Bomberos en la Región de Atacama
http://www.bomberos.cl/php/noticia.php?id=4534
ACCEDA AQUÍ A GALERÍA DE FOTOS
Cualquier descripción de la situación que se vive en la Región de Atacama tras los 17 aluviones que la afectaron es insuficiente. Las imágenes que se observan en las pantallas de televisión son solo un pequeño recuadro del desastre. El impacto de ver en su real magnitud ciudades bajo el barro o poblaciones de pequeñas localidades completamente arrasadas desde sus cimientos son imágenes que superan toda ficción.
Esas fueron las impresiones compartidas por la delegación de la Junta Nacional de Bomberos que se desplazó a la zona el martes 7 de abril, encabezados por el Vicepresidente Nacional, Marcelo Zúñiga; acompañado del Gerente General, Luis Erpel; la Jefa del Departamento de Infraestructura, Carolina Tapia y un técnico de la empresa Iveco.
La llegada fue a la localidad de Chañaral, donde fueron recibidos por el Presidente Regional de Atacama Nelson Cortés y el Superintendente del Cuerpo de Bomberos, Fernando Pérez., visiblemente afectado por lo que les ha tocado vivir y por el cansancio acumulado por el trabajo realizado junto a sus voluntarios, día y noche, durante 13 días.
El Vicepresidente Nacional fue comisionado por el Directorio Nacional –que en su Sesión del 28 de marzo aprobó destinar recursos de la Junta Nacional para la superación de la emergencia, como se hizo tras el terremoto de 2010 y del que afectó al norte de nuestro país el año pasado- para que viera en terreno las necesidades de los Cuerpos de Bomberos y para transmitir los sentimientos de solidaridad de todos los bomberos del país.
El Cuartel de Bomberos ubicado en Chañaralquedó sumido en el barro, con su carro bomba incluido, pero con el pasar de los días lograron ir despejando poco a poco la Sala de Máquinas y ayudados por voluntarios de Cauquenes sacar la unidad de material mayor. Todo a simple vista parece inservible.
Lo más sorprendente de todo es que el Superintendente, visiblemente cansado, al ser consultado respecto al estado de ánimo de los voluntarios y el suyo, levanta la voz con una entonación positiva para asegurar que están optimistas de que todo mejorará, que saldrán adelante y que lo importante es seguir ayudando a su comunidad.
Inmediatamente después de realizado el catastro, se decide ir a ver el estado en que quedó la Quinta compañía, ubicada en El Salado, donde el techo del Cuartel sirvió de soporte – milagrosamente – para que un grupo de personas se salvara de las fuerzas del arrastre de las aguas y el lodo, hasta que fueron rescatados horas después.
El Salado
Nuestra sorpresa fue mayor al llegar a esta localidad visiblemente desbastada. Donde había poblaciones completas no quedaba más que una explanada. Llegamos a una especie de sede vecinal donde están alojando los bomberos, nueve de los cuales perdieron todo lo que tenían, pero la generosidad de los voluntarios supera las expectativas y en medio de sus visibles carencias esperaban con almuerzo –muy rico por lo demás- a la comitiva.
En este pequeño lapsus de descanso, el Superintendente rememora que la situación vivida, el mismo día, fue algo complejo “porque por medio de la repetidora nosotros tenemos a toda la provincia conectada, desde El Salvador, Inca de Oro. Pero ese día ni siquiera los respaldos funcionaron, de hecho ni siquiera sabemos por qué quedamos incomunicados. La reacción de los de El Salado era avisarnos de lo que ocurría, o los de Diego de Almagro, entonces nosotros hubiésemos tenido mucho más tiempo para evacuar pero la comunicación no funcionó. Cuando asumimos que esto era grave salieron todos los voluntarios y los carros a las calles”.
Una de las historias que el Superintendente de Chañaral rememora es la que ocurrió “en un restaurante que hay a una cuadra del Cuartel, donde el dueño encerró con llave al personal para que no evacuaran y un hijo de los que trabajaban en el local, que es voluntario nuestro, rompió la puerta y ahí salieron las 7 personas”.
El Director de la Compañía de El Salado, Cristián Silva, con poco más de 30 años lleva dos y medio como voluntario, ingresando a la institución por el entusiasmo que le mostraba su esposa a diario por vestir el uniforme. Sus ojos se humedecen al rememorar el día de la tragedia “fue un momento muy fuerte, pero gracias a Dios ya lo estamos superando y estamos un poco mejor. Hemos tenido ayuda de todos lados, eso es lo importante, que no nos han dejado solos”, señala.
Pero en un principio no fue así, ya que quedaron aislados al perder comunicación a través de la frecuencia radial con sus vecinos de Diego de Almagro y Chañaral. “Logré comunicarme con una Compañía de Caldera por intermedio del 132, imagínese, hice contacto con el Comandante de la Primera Compañía pidiéndole por favor que mandara ayuda ya que nadie sabía que nosotros estábamos aquí , si yo creo que El Salado se hizo conocido por este tema”, señala con convicción Cristián Silva.
El relato de cómo se fueron sucediendo las cosas una vez que comenzaron las intensas lluvias es angustiante y la voz parece entrecortársele al Director de la Compañía, quien recuerda que “teníamos una idea de que venía el rio pero no en la magnitud que llegó acá porque nuestros compañeros de Diego de Almagro venía haciendo un seguimiento. Esto partió alrededor de las 04:30 horas del día anterior y los bomberos de Diego de Almagro nos mantenían informado, mas menos cada una hora, sobre las condiciones del río”.
A las 22:00 horas de esa misma noche los voluntarios de El Salado concurrieron a hacer un seguimiento a un camino que se llama Chañarcito y ahí se dieron cuenta que el río venía descendiendo por otras quebradas.
“Bajamos a El Salado y tomamos un plan de acción que fue conteder el puente y aislamos el pueblo, porque nosotros nunca pensamos que iba a ser así. Contuvimos el río lo más que pudimos, pero se nos salieron las quebradas y por las partes posteriores empezó a pasar el agua por el centro y al otro día ya el rio se sobrepaso y empezó a reventar las contenciones que teníamos. Dimos la alerta a la población con un toque de sirena para que tuvieran alerta de que algo iba a pasar y una vez que nos dimos cuenta de que el tema se estaba saliendo de las manos alertamos a la comunidad con cuatro toques para que desalojaran sus casas, tratamos de sacar la mayor gente posible con las unidades y gracia a dios lograos evacuar a muchos o si no tendríamos muchas más pérdidas”, señala el Director.
La voz de Cristián Silva se quiebra al corroborar que ha llorado mucho, “sentí mucha impotencia por toda la gente que había quedado, siendo que nosotros tratamos de hacer lo mayor posible para que no pasara eso y en su momento me quebré porque yo pedía que nos vinieran a ayudar y no llegaba la ayuda y veíamos que el río seguía creciendo. Pedíamos por favor que el Cuartel no colapsara, porque teníamos mucha gente esperando a ser rescatada y si cedía la construcción ahí sí que ya iba a ser muy fuerte para todos los voluntarios, porque todos tratamos de hacer lo mejor posible para no perder tanta gente”.
Lamentan la pérdida de un ex voluntario “que estuvo en todo momento con nosotros apoyándonos hasta que lo venció el sueño, se fue a dormir a su casa y justo se salió el rio y murió. Tuvimos la suerte de encontrarlo nosotros mismos acá y también dimos con el cuerpo de un joven de Diego de Almagro que lo encontramos gracias a una búsqueda que hicimos después de 4 días”, recuerda el Director quien con la finalidad de poder trabajar mejor junto a su mujer en la ayuda a la comunidad decidió mandar a su hijo mayor (14 años) a Santiago y el menor a Salamanca, a quienes no ven desde hace una semana.
Antes de emprender camino, el Vicepresidente Nacional quiso saludar a los Grupos USAR que aún permanecían en Chañaral en el estadio Luis Álamo Luque. En dicho lugar los felicitó por las labores que están desarrollando, mencionando la encuesta Cadem que salió el lunes 6 de abril y en la cual Bomberos es la institución mejor evaluada en su actuación en la tragedia del norte con un 95% de aprobación, resultado a juicio del Vicepresidente Nacional se debe al trabajo que los bomberos están haciendo en la zona y principalmente los Grupos de Rescate Urbano.
Apoyo sicológico para Diego de Almagro
El recorrido de la comitiva debía continuar a otro destino que era Diego de Almagro, ahí la situación no sería fácil, ya que a la perdida de material se sumaba la desaparición de un brigadier que cayó desde el techo de un carro cuándo realizaba labores de rescate, imagen difundida incansablemente a través de la televisión.
Los voluntarios están alojando en una sede que les fue facilitada, donde también se encuentran un grupo de voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Coquimbo, quienes se han abocado a atender las emergencias, las cuales nos señalan han sido continuas y variadas, pero su permanencia en el lugar será por dos días más.
Esa es una de las preocupaciones del Superintendente, Daniel González, quien le menciona al Vicepresidente Nacional que necesitan ver quién va a suplir a dichos voluntarios ya que ellos perdieron todo su material y los dos carros.
“El problema no es el Cuartel”, señala enfáticamente el Superintendente, ya que el que resultó destruido era una casa que les había facilitado la municipalidad mientras le construía uno definitivo. “El tema es primero encontrar al muchacho. Lo segundo, si Coquimbo está cubriendo todas las emergencias ellos se van el viernes y si bien tenemos el B1 que lo logramos rescatar, lo cierto es que necesitamos gente y los equipos se perdieron todos todo está a la vista. También necesitamos apoyo psicológico para lo voluntarios”, requerimientos que fueron inmediatamente gestionados por el Vicepresidente Nacional y el Gerente General (Ver nota sobre envío de carro bomba).
El Vicesuperintendente de Diego de Almagro, Mario Gaete, recuerda que 3 horas antes del desastre “le digo a mi Superintendente que va a quedar la embarrada y que evacuemos. Fuimos a hablar a la municipalidad, al Gobernador, nadie nos creía. Yo les decía a los de la municipalidad que prefería pecar de exagerado y no después estar lamentando”.
El Oficial se emociona…”Es que llevo trabajando sin parar desde el viernes antes de la emergencia, 14 días, día y noche y ni siquiera he visto a mi familia. Aquí hay mucha gente que tiene tierra que son adultos mayores, entonces como bomberos teníamos que ir a ayudar a colocar nailon a arreglar el techo, trabajo que comenzó dos días antes de que empezara todo esto. Entonces es la impotencia de que nadie te cree y te miran como diciendo de qué estás hablando. Los primeros 5 días estábamos solos, reventados, todos mojados, 30 voluntarios y 8 que perdieron todo y que todavía están trabajando ni siquiera han ido a sus casa”.
El tema del brigadier también los tiene afectados, “muy mal y mas a mi porque eran como mi hijos. Soy Instructor y a Álvaro Plaza lo conocía hace 3 años y era muy bueno bomberilmente”, dice Mario Gaete. El Grupo Lautaro está realizando la búsqueda de su cuerpo y éltiene la esperanza de que lo encontraran “no voy a descansar hasta que lo encontremos y si me tengo que sacar la insignia para seguir buscándolo lo seguiré buscando no voy a parar. Es mi hijo”, señala enfático.
Soluciones a Diego de Almagro
El Vicepresidente, al igual que en las otras localidades, saludo a una pequeña formación de voluntarios de Diego de Almagro, a quienes transmitió en nombre del Presidente Nacional y del Directorio apoyo moral y la fuerza para seguir trabajando, “principalmente a los que son de la zona y agradecer a la gente de Coquimbo que viene en apoyo y a los Cuerpos de Bomberos de otras ciudades. Entendemos como bomberos que las cosas son difíciles para nosotros, especialmente por haber perdido un compañero y amigo. Quiero darles ánimo y fuerza, levantarles la moral. Ustedes han hecho todo por la comunidad entendiendo también el dolor que están pasando, las pérdidas de nuestro equipamiento y carro, que de una u otra forma pasan a un segundo plano, pero igualmente se sienten. Para nosotros que somos de Cuerpos de Bomberos chicos, que estamos más alejados de las zonas céntricas es doblemente más difícil ser bombero que en las grandes ciudades”.
Marcelo Zúñiga le comunicó la resolución del Directorio Nacional tendiente a destinar recursos de la Junta Nacional, “recursos de todos ustedes y de los Bomberos de Chile”, para poder subsanar de alguna forma y minimizar los daños de los Cuarteles y equipamiento. “Entendemos que lo humano no lo recuperaremos solo tener la tranquilidad de que están haciendo todo lo posible como Cuerpo de Bomberos de Diego de Almagro. Ojala lo encontremos y si no de una u otra forma lo tendremos que recordar cómo fue en vida, como un compañero y amigo.Mucha fuerza y entusiasmo para seguir trabajando. La entrega de la vida de un compañero demuestra que somos fuertes y grandes y eso no debemos perderlo. Como Institución tenemos que levantarnos sacudirnos y seguir funcionando, porque la comunidad es la que está esperando que ustedes sigan entregando lo que han entregado. En nombre de todos los Bomberos de Chile les doy las gracias” concluyó el Vicepresidente Nacional, anunciando además la llegada de una nueva unidad para el Cuerpo (
Ver nota relacionada).
El Superintendente agradeció la visita señalando que quería que sus voluntarios recibieran el aliento del Vicepresidente. “Sé, en lo personal, como se siente cada uno de ustedes, pero esto de alguna forma nos ayuda a pararnos, porque tenemos que seguir cumpliendo labores sin dejar de lado a lo que estamos avocados. Mucho ánimo, tenemos que seguir de pie y al menos hoy día tenemos respuestas claras y la Junta Nacional de Bomberos está preocupada de las problemáticas que tenemos como Cuerpos de Bomberos, tanto los de nosotros como los otros que fueron afectados”, concluyó.
Tierra Amarilla y Copiapó
El recorrido continuó a Terra Amarilla, donde dos bomberos perdieron todo y 5 voluntarios resultaron parcialmente damnificados, uno de ellos su Vicesuperintendente. A la llegada de la comitiva una unidad del Cuerpo de Bomberos de Puchuncaví se hacía presente para ayudar en la búsqueda de un cuerpo, y por instrucción de su Comandancia no habría regreso hasta que no se diera con la víctima.
El Comandante, Jaime Castillo, detalló que están a 60 kilómetros de San Antonio, después de los Loros y el cuerpo de uno de las personas desaparecidas lo encontraron como a 5 kilómetros de Tierra Amarilla. “Se hizo también el rescate de unos chinos, la búsqueda se inició después de que me llamaron de la embajada de dicho país indicándome que tenían 5 personas perdidas. Los encontramos con vida en el sector Maray. Otras dos personas las encontramos muertas en la quebrada, trabajaban en una minería y estaban haciendo sondaje. Al parecer los pilló la lluvia y venían bajando en la camioneta que quedó desintegrada”.
Acompañados del Director, se emprende rumbo a la Compañía que está ubicada en Los Loros, donde una joven Directora relata que son afortunados ya que la unidad de material mayor que les fue entregada días antes por la Junta Nacional en una ceremonia realizada en el Parque O’Higgins y que fue encabezada por la Presidenta Michelle Bachelet, se salvó ya que la habían dejado en Tierra Amarilla para la realización de un acto de entrega oficial en que participaría la comunidad.
El otro milagro, si puede llamarse así, es que “nuestro Cuartel está parado porque hubo una micro que fue arrastrada por el aluvión pero quedó parada en nuestro Cuartel obstaculizando el paso del agua y el barro, desviándolo hacia la calle”, recuerda la Directora.
Con respecto a las unidades de material mayor, el Comandante relató que su padre que es mecánico, al igual que él, le instruyó a que lavara todos los días las unidades a fin de eliminar el barro y polvo.
A este respecto el Vicepresidente Nacional, Marcelo Zúñiga, les anunció que una vez finalizada la emergencia y cuando sea retirado el barro de las calles y Cuarteles se hará una revisión preventiva a todas las unidades de material mayor.
El viaje finalizó con la visita al Cuartel de la Tercera Compañía de Copiapó, una ciudad destruida por el agua y el barro, cuya fuerza arrancó señales éticas, postes de alumbrado, casas, etc.
La unidad bomberil no quedó exenta al desastre, el barro entró cubriendo hasta la mitad de las paredes del Cuartel, dejando material menor inutilizable. No obstante, con la finalidad de subir la moral, los voluntarios comenzaron a limpiar y en gran parte lo han logrado, pero los daños son evidentes.
Región de Antofagasta
Cabe mencionar que el Vicepresidente Nacional recorrió previamente a la Región de Atacama, junto al Presidente Regional de Antofagasta, Luis Zarate, todos los Cuarteles del Cuerpo de Bomberos de Antofagasta y Taltal, zonas que también se vieron afectados por las intensas lluvias.
“Recordemos que no hubo aluvión pero si una inundación que afectó a casi todos los Cuarteles en sus techos y cielo y eso pasó a las Salas de Guardias nocturnas así que ahí también tendremos que trabajar en la reparación de los 9 Cuarteles.
Recorrimos también Taltal, que tiene un Cuartel General y una Compañía, pero en este caso la Junta Nacional invirtió a través de recursos propios el año pasado para mejorar sus construcciones, recordemos que a ello también les llego un carro en reasignación nuevo y logramos el año pasado reparar prácticamente la mitad del Cuartel pero el sector antiguo se llovió y tiene unos daños pequeños.Todo lo que corresponde a la Región de Antofagasta ya se hizo el levantamiento y se está haciendo la evaluación de los gastos, pero esto radica principalmente en daño a los techos”, concluyó el Vicepresidente Nacional Marcelo Zúñiga.
