La Unidad Militar de Emergencias (UME) estudia adquirir carros de combate Leopard 1 reconvertidos en vehículos apaga fuegos para incendios de alto riesgo
La Unidad Militar de Emergencias (UME) está adquiriendo material para combatir los desastres naturales. Para la extinción de incendios, el teniente general Coll tiene la posibilidad de adquirir carros de combate Leopard 1 reconvertidos como vehículos apaga fuegos
Según fuentes del Ministerio de Defensa consultadas por El Confidencial Digital, la UME baraja la adquisición de un novedoso sistema para la extinción de incendios que garantiza la seguridad de los militares españoles de esta unidad en caso de verse acorralados por el fuego.
Se trata de carros de combate Leopard 1 a los que se les ha sustituido la torreta por un depósito de 20.000 litros de agua y el cañón por una manga –también llamada lanza- que ‘dispara’ agua a presión capaz de alcanzar los 70 metros de distancia. El carro tiene, además, protección NBQ.
El modelo reconvertido se denomina ‘Jumbo-Tank’ PHF 20 T. Es un vehículo sobre orugas diseñado especialmente para combatir incendios en bosques, en terrenos de difícil acceso o en zonas peligrosas y para tareas de extinción de alto riesgo como incendios de aviones o depósitos de productos químicos.
Se destaca por un tanque para líquido extintor de gran capacidad (unos 700 litros de aditivos) y una lanza o cañón hidrante accionado por control remoto. La utilización de este vehiculo especial podrá realizarse, en gran medida, independientemente de su avituallamiento y soporte externos.
Como vehiculo base para el PHF 20 T se utiliza el chasis del carro de combate pesado Leopard 1 como vehículo sobre orugas que permite una gran movilidad y maniobrabilidad sobre el terreno y al mismo tiempo ejerce una reducida presión sobre el suelo pese a su gran carga y peso. Las cadenas deslizantes tienen además protecciones de goma para su desplazamiento por calles y rutas públicas.
En el chasis están integrados dos asientos, uno al lado del otro, para el conductor y el operador de los equipos de extinción. La estructura portante del carro de combate pesado garantiza una elevada protección térmica y mecánica para el personal de la dotación. La instalación de ventilación incorporada asegura además al personal su protección contra humo y gases peligrosos.
En el centro del chasis se encuentra el compartimiento con la bomba para los sistemas de extinción esta diseñada para abastecerse de agua de forma autónoma (bomba aspirante) como de fuentes externas (cubas, depósitos, etc.). Esta bomba es accionada directamente desde el motor del vehículo por medio de un sistema hidráulico para regular la potencia de bombeo durante la marcha (Operación ‘Roll and Pump’).
Sobre el chasis se encuentra montado en forma fija el tanque para el agente extintor (sistema de tres cámaras) con 20.000 litros de capacidad. El depósito cubre casi completamente el chasis. En la parte delantera se fija al bastidor existente de la torreta y en la parte posterior sobre soportes soldados al chasis.
Todas las uniones se ejecutaron como fijaciones a tornillo de forma tal que el tanque de agua pueda separarse del chasis para realizar trabajos de mantenimiento. La auto bomba ‘Jumbo-Tank’ está diseñada para recibir agua extintora desde el exterior. La lanza o cañón hidrante se encuentra en la parte delantera del tanque de agua sobre los puestos de los operadores. Para protección de la dotación se puede dirigir desde el interior del vehiculo mediante un accionamiento eléctrico.
En general, el vehículo se maneja desde las aperturas diseñadas al efecto. Al llegar al lugar del incendio o a zonas peligrosas se cierran las escotillas para protección de la dotación y se observa el terreno a través de los visores específicos de la unidad.
Estas son algunas de las imágenes del vehículo apaga fuegos que comercializa la empresa alemana Flensburger Fahrzeugbau Gesellschaft mbH (FFG):