Cabreados de pedir limosna en la calle para mantener paradas sus mangueras y bien parchadas sus escaleras ¿o viceversa?, a mediodía del domingo los bomberos de Palmilla, Sexta Región, abandonaron su cuartel y comenzaron a caminar hacia Santiago.
Los 14 chicos buenos se pusieron en marcha para exigir un carro bomba decente.
Al último incendio acudieron en una carreta chancha tirada por una yunta de bueyes y habilitada con dos tambores de agua. Cuando llegaron al siniestro no quedaba ni el rescoldo de la rancha y los enfurecidos damnificados los recibieron a peñascazos.
"Malagradecidos. Tampoco tenemos sirena. La pescadita fue tentada por la farándula y la próxima temporada debuta como opinóloga. Nos estamos arreglando con un perrito que aúlla como barítono para anunciar los amagos, los incendios declarados y los llamados de comandancia", dijo a La Cuarta, muy amargado, el teniente Cienfuegos.
Así, los rebeldes de Palmilla liderados por el maquinista Bernardo Rubilar, iniciaron la épica caminata. La idea era llegar el martes hasta La Moneda, donde sobra el billete, para pedirle a La Jefa una bombita nueva.
No alcanzaron a caminar ni 20 kilómetros cuando se les puso por delante su comandante, Fernando Hidalgo, quien los amenazó con desbomberizarlos allí mismo si persistían en su idea.
"Regresamos, obedientes, cabizbajos y contritos al cuartel, pero aún así nos pasaron al Consejo Superior de Disciplina. Capaz que nos echen", se lamenta Cienfuegos.
La última esperanza de este grupo de chicos buenos es la promesa del alcalde de Palmilla, Nelson Cabrera, quien moverá cielo y tierra para conseguir los 20 palos que cuesta un carrobomba de segunda mano, re-100 ajustado, nunca taxi, y con la sirena bien afinada y tetona. Una joyita.
Q lamentable esta situación....opinen
saludos
Fuente: lacuarta.cl
Los 14 chicos buenos se pusieron en marcha para exigir un carro bomba decente.
Al último incendio acudieron en una carreta chancha tirada por una yunta de bueyes y habilitada con dos tambores de agua. Cuando llegaron al siniestro no quedaba ni el rescoldo de la rancha y los enfurecidos damnificados los recibieron a peñascazos.
"Malagradecidos. Tampoco tenemos sirena. La pescadita fue tentada por la farándula y la próxima temporada debuta como opinóloga. Nos estamos arreglando con un perrito que aúlla como barítono para anunciar los amagos, los incendios declarados y los llamados de comandancia", dijo a La Cuarta, muy amargado, el teniente Cienfuegos.
Así, los rebeldes de Palmilla liderados por el maquinista Bernardo Rubilar, iniciaron la épica caminata. La idea era llegar el martes hasta La Moneda, donde sobra el billete, para pedirle a La Jefa una bombita nueva.
No alcanzaron a caminar ni 20 kilómetros cuando se les puso por delante su comandante, Fernando Hidalgo, quien los amenazó con desbomberizarlos allí mismo si persistían en su idea.
"Regresamos, obedientes, cabizbajos y contritos al cuartel, pero aún así nos pasaron al Consejo Superior de Disciplina. Capaz que nos echen", se lamenta Cienfuegos.
La última esperanza de este grupo de chicos buenos es la promesa del alcalde de Palmilla, Nelson Cabrera, quien moverá cielo y tierra para conseguir los 20 palos que cuesta un carrobomba de segunda mano, re-100 ajustado, nunca taxi, y con la sirena bien afinada y tetona. Una joyita.
Q lamentable esta situación....opinen
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Fuente: lacuarta.cl