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El humo se podía divisar desde varios kilómetros. El atractivo valle de Elqui y su verde característico estaba envuelto en cenizas, lo cual obligó a cortar el tránsito en la ruta D-41, que conecta a la capital regional con Vicuña. Así era la situación el sábado por la tarde, en el siniestro que se declaró a pocos metros de la localidad de El Molle, donde el aire estuvo irrespirable.
Pasadas las 15:00 horas, bomberos de Vicuña fueron alertados de un incendio forestal, que cada vez se fue propagando más de manera muy peligrosa. Y es que un total de 7 familias que habitan en el sector estaban siendo amenazadas en su integridad. Las llamas arrasaron con cañaverales, pastizales y un extenso bosque de eucaliptus. La magnitud de la emergencia obligó a los voluntarios vicuñenses a pedir apoyo a compañías de La Serena.
De esta manera, tras una ardua lucha con el fuego que arrasó con más de 3 kilómetros de vegetación, por fin se pudo dominar la situación pasadas las 17:00 horas, reestableciéndose el tránsito pero sacando cuentas negativas respecto a las pérdidas de árboles, alterando el paisaje que caracteriza al valle.
Por fortuna no hubo desgracias personales que lamentar. Aunque sí se reportó una persona herida, identificada como Janette Cortés Salas, de 43 años, que sufrió una caída cuando estaba huyendo del fuego desde un inmueble. Fue trasladada a un recinto asistencial de Vicuña, donde se está recuperando.
Una vez controladas las llamas, llegaba el momento de establecer responsabilidades. De esta manera se determinó que el origen fue en un camping sin nombre, que se encontraba en desuso. Estaba cerrado desde el verano del 2009.
El comandante del cuerpo de bomberos de Vicuña, Juan Díaz, señaló que el siniestro “fue acción de terceros”.
Según contó, hay testigos que vieron a personas realizando una fogata, la cual no fue apagada en forma correcta. Desde ahí saltaron las chispas, ayudadas por la acción del viento, que hicieron que el sector se convirtiera en un infierno por un par de horas.
Díaz agradeció la cooperación de las dos compa¬ñías de la capital regional que acudieron a la emergencia. También fueron voluntarios de Marquesa. De Vicuña participaron 19 bomberos.
Hasta el momento no se ha podido dar con las personas que hicieron la fogata. De todas maneras, ya fue notificado del hecho el dueño del terreno donde estaba el camping. La calma ya volvió al valle, en un hecho que pudo tener mayores consecuencias.
Diario El Día
El humo se podía divisar desde varios kilómetros. El atractivo valle de Elqui y su verde característico estaba envuelto en cenizas, lo cual obligó a cortar el tránsito en la ruta D-41, que conecta a la capital regional con Vicuña. Así era la situación el sábado por la tarde, en el siniestro que se declaró a pocos metros de la localidad de El Molle, donde el aire estuvo irrespirable.
Pasadas las 15:00 horas, bomberos de Vicuña fueron alertados de un incendio forestal, que cada vez se fue propagando más de manera muy peligrosa. Y es que un total de 7 familias que habitan en el sector estaban siendo amenazadas en su integridad. Las llamas arrasaron con cañaverales, pastizales y un extenso bosque de eucaliptus. La magnitud de la emergencia obligó a los voluntarios vicuñenses a pedir apoyo a compañías de La Serena.
De esta manera, tras una ardua lucha con el fuego que arrasó con más de 3 kilómetros de vegetación, por fin se pudo dominar la situación pasadas las 17:00 horas, reestableciéndose el tránsito pero sacando cuentas negativas respecto a las pérdidas de árboles, alterando el paisaje que caracteriza al valle.
Por fortuna no hubo desgracias personales que lamentar. Aunque sí se reportó una persona herida, identificada como Janette Cortés Salas, de 43 años, que sufrió una caída cuando estaba huyendo del fuego desde un inmueble. Fue trasladada a un recinto asistencial de Vicuña, donde se está recuperando.
Una vez controladas las llamas, llegaba el momento de establecer responsabilidades. De esta manera se determinó que el origen fue en un camping sin nombre, que se encontraba en desuso. Estaba cerrado desde el verano del 2009.
El comandante del cuerpo de bomberos de Vicuña, Juan Díaz, señaló que el siniestro “fue acción de terceros”.
Según contó, hay testigos que vieron a personas realizando una fogata, la cual no fue apagada en forma correcta. Desde ahí saltaron las chispas, ayudadas por la acción del viento, que hicieron que el sector se convirtiera en un infierno por un par de horas.
Díaz agradeció la cooperación de las dos compa¬ñías de la capital regional que acudieron a la emergencia. También fueron voluntarios de Marquesa. De Vicuña participaron 19 bomberos.
Hasta el momento no se ha podido dar con las personas que hicieron la fogata. De todas maneras, ya fue notificado del hecho el dueño del terreno donde estaba el camping. La calma ya volvió al valle, en un hecho que pudo tener mayores consecuencias.
Diario El Día