Tres casas destruidas en voraz incendio en Iquique
Dos viviendas destrozadas por las llamas y otra inundada por el agua, además dos bomberos lesionados fue el resultado de un gigantesco incendio ocurrido en la intersección de las calles Oscar Bonilla con Moisés González durante la mañana de ayer.
El siniestro dejó literalmente en la calle a las cuatro familias que habitaban en las casas ubicadas en Oscar Bonilla 33, 23 y 19.
Voluntarios de las compañías de bomberos 6, 11, 12, 4 y 14, alertados tras llamado al 132 por parte de los dueños de las casas siniestradas, llegaron hasta el lugar para combatir el incendió que aún no tiene causa conocida.
El fuego se originó a las 10.16 horas en Oscar Bonilla 23 y sólo un minuto después fue declarado por bomberos como incendio, acudiendo rápidamente los voluntarios de las compañías señaladas.
Pese a la magnitud del hecho y a las pérdidas materiales, ninguna de las 19 personas que componían los cuatro grupos familiares quedaron lesionados y sólo se debió lamentar las leves lesiones por inhalación de humo de dos voluntarios de bomberos.
La dueña de la vivienda en la cual se originó el incendio, Rosa Ortiz, debió ser trasladada a la asistencia pública en un colectivo tras quedar en shock por ver su hogar y su lugar de trabajo completamente destruido, ya que ella mantenía un taller de costura compuesta por tres máquinas de cocer al interior de su vivienda.
Las llamas fueron sofocadas cerca de las 11 de la mañana y luego bomberos procedió a remover los escombros para buscar posibles focos de combustión y evitar el resurgimiento de las llamas.
incendio
La viuda Heriberta Quezada Mesías estaba barriendo el frontis de su casa ubicada en Oscar Bonilla 33 cuando sorpresivamente fue alertada por una de sus vecinas que en el patio de la casa número 23, de propiedad de Rosa Ortíz, habían llamas que amenazaban con quemar esta vivienda y otras del sector.
De forma inmediata llamaron a Bomberos y dieron a conocer la existencia del peligro. En una rápida acción llegaron los voluntarios y ejecutaron un plan operativo que permitió sofocar las llamas que alcanzó además la colindante casa número 33, de propiedad de Quezada Mesías.
Si bien bomberos alcanzó a sofocar las llamas y evitó que el siniestro se transformara en una tragedia aún mayor, la vivienda número 19, de propiedad de Marleen Esparza, quedó en ruinas por efecto de las aguas lanzadas para frenar las llamas.
En el hogar donde se originó el incendio vivían las familias de las hermanas Rosa y Alicia Ortiz, los que en su totalidad sumaban cinco adultos y tres niños, dos de estos de 5 y 3 años.
En la casa de Oscar Bonilla 33 vivía Heriberta Quezada junto a su hija, yerno y dos nietos.
En la vivienda de Marleen Esparza, dañada por el aguas, habitaban cuatro adultos y dos niños.
A la hora del siniestro la mayoría de los afectados se encontraban durmiendo o viendo televisión en sus dormitorios.
Fuente: La Estrella de Iquique
Dos viviendas destrozadas por las llamas y otra inundada por el agua, además dos bomberos lesionados fue el resultado de un gigantesco incendio ocurrido en la intersección de las calles Oscar Bonilla con Moisés González durante la mañana de ayer.
El siniestro dejó literalmente en la calle a las cuatro familias que habitaban en las casas ubicadas en Oscar Bonilla 33, 23 y 19.
Voluntarios de las compañías de bomberos 6, 11, 12, 4 y 14, alertados tras llamado al 132 por parte de los dueños de las casas siniestradas, llegaron hasta el lugar para combatir el incendió que aún no tiene causa conocida.
El fuego se originó a las 10.16 horas en Oscar Bonilla 23 y sólo un minuto después fue declarado por bomberos como incendio, acudiendo rápidamente los voluntarios de las compañías señaladas.
Pese a la magnitud del hecho y a las pérdidas materiales, ninguna de las 19 personas que componían los cuatro grupos familiares quedaron lesionados y sólo se debió lamentar las leves lesiones por inhalación de humo de dos voluntarios de bomberos.
La dueña de la vivienda en la cual se originó el incendio, Rosa Ortiz, debió ser trasladada a la asistencia pública en un colectivo tras quedar en shock por ver su hogar y su lugar de trabajo completamente destruido, ya que ella mantenía un taller de costura compuesta por tres máquinas de cocer al interior de su vivienda.
Las llamas fueron sofocadas cerca de las 11 de la mañana y luego bomberos procedió a remover los escombros para buscar posibles focos de combustión y evitar el resurgimiento de las llamas.
incendio
La viuda Heriberta Quezada Mesías estaba barriendo el frontis de su casa ubicada en Oscar Bonilla 33 cuando sorpresivamente fue alertada por una de sus vecinas que en el patio de la casa número 23, de propiedad de Rosa Ortíz, habían llamas que amenazaban con quemar esta vivienda y otras del sector.
De forma inmediata llamaron a Bomberos y dieron a conocer la existencia del peligro. En una rápida acción llegaron los voluntarios y ejecutaron un plan operativo que permitió sofocar las llamas que alcanzó además la colindante casa número 33, de propiedad de Quezada Mesías.
Si bien bomberos alcanzó a sofocar las llamas y evitó que el siniestro se transformara en una tragedia aún mayor, la vivienda número 19, de propiedad de Marleen Esparza, quedó en ruinas por efecto de las aguas lanzadas para frenar las llamas.
En el hogar donde se originó el incendio vivían las familias de las hermanas Rosa y Alicia Ortiz, los que en su totalidad sumaban cinco adultos y tres niños, dos de estos de 5 y 3 años.
En la casa de Oscar Bonilla 33 vivía Heriberta Quezada junto a su hija, yerno y dos nietos.
En la vivienda de Marleen Esparza, dañada por el aguas, habitaban cuatro adultos y dos niños.
A la hora del siniestro la mayoría de los afectados se encontraban durmiendo o viendo televisión en sus dormitorios.
Fuente: La Estrella de Iquique