Un bombero con la Biblia bajo el brazo
El superintendente de Bomberos le solicitó ser capellán y el obispo de Temuco dio el visto bueno. Hace cuatro años ocupa el cargo.
"Como bombero de la Tercera Compañía rescato personas atrapadas entre los fierros, pero como cura, rescato las almas, a pesar que algunos no quieren ser rescatados y eso es lo tremendamente complicado", dice entre risas Jaime Villalobos, párroco del Sagrario, rector de la Catedral de Temuco y además voluntario de la Tercera Compañía de Bomberos de Temuco, con especialidad en rescates.
Lo de bombero surgió el año 1983, cuando era párroco de Collipulli. "Me gustaba mucho ir a mirar el trabajo bomberil. Son personas que se sacrifican sin esperar una recompensa, sólo lo hacen por el amor al servicio a la comunidad".
Eso, hasta que un día lo invitaron a ser parte de la Primera Compañía, lo que aceptó gustoso.
Con el tiempo se trasladó a la capital regional, sin perder su condición de voluntario de Collipulli. "En un minuto me solicitaron formar parte de la Tercera Compañía Germania, con especialidad en rescates, ya que los voluntarios deben pasar por momentos muy difíciles. En esa compañía debí nuevamente partir de cero, como un postulante más, hasta que por unanimidad de la compañía, me aceptaron como voluntario", relató el religioso.
El cura bombero dijo que muchas veces "le comían los pies" cuando encabezaba alguna celebración litúrgica en la Catedral o en Collipulli. "Paraba la misa y solicitaba a los voluntarios presentes que se retiraran, ya que había un llamado, y a los demás les solicitaba que oraran para que el incendio no sea de magnitud y se apague fácilmente".
Fuente: El Diario Austral de Temuco
El superintendente de Bomberos le solicitó ser capellán y el obispo de Temuco dio el visto bueno. Hace cuatro años ocupa el cargo.
"Como bombero de la Tercera Compañía rescato personas atrapadas entre los fierros, pero como cura, rescato las almas, a pesar que algunos no quieren ser rescatados y eso es lo tremendamente complicado", dice entre risas Jaime Villalobos, párroco del Sagrario, rector de la Catedral de Temuco y además voluntario de la Tercera Compañía de Bomberos de Temuco, con especialidad en rescates.
Lo de bombero surgió el año 1983, cuando era párroco de Collipulli. "Me gustaba mucho ir a mirar el trabajo bomberil. Son personas que se sacrifican sin esperar una recompensa, sólo lo hacen por el amor al servicio a la comunidad".
Eso, hasta que un día lo invitaron a ser parte de la Primera Compañía, lo que aceptó gustoso.
Con el tiempo se trasladó a la capital regional, sin perder su condición de voluntario de Collipulli. "En un minuto me solicitaron formar parte de la Tercera Compañía Germania, con especialidad en rescates, ya que los voluntarios deben pasar por momentos muy difíciles. En esa compañía debí nuevamente partir de cero, como un postulante más, hasta que por unanimidad de la compañía, me aceptaron como voluntario", relató el religioso.
El cura bombero dijo que muchas veces "le comían los pies" cuando encabezaba alguna celebración litúrgica en la Catedral o en Collipulli. "Paraba la misa y solicitaba a los voluntarios presentes que se retiraran, ya que había un llamado, y a los demás les solicitaba que oraran para que el incendio no sea de magnitud y se apague fácilmente".
Fuente: El Diario Austral de Temuco