Todavía tuvo mas muertos un incendio de siquiátrico en el sur de Chile, hubo unos 50 fallecidos.
En su revista institucional, con fotos y varias páginas se mostraban las fotos de los cadáveres, varios de los internos estaban amarrados a sus camas.
Han pasado unos 30 años, y las excusas siguen sonando similares "la estructura estaba forrada en lata", "se demoraron en avisarnos", "los grifos no tenían presión".
Lo peor fue que en el texto del artículo (de la revista institucional, nada menos) decía "se ordenó que los pitones fueran regulados a 30 gpm para cuidar el agua". Casi 30 años y casi en las mismas.
Hay que aprovechar estos 30 o 100 años los errores que se cometan sean nuevos errores y no centésimo quincuagésima vez que se repite.
Ojalá que en los incendios de aquí a fin de año, sea industrial, comercial, etc, se lo enfrente de manera coordinada y eficaz.
Caso contrario van a pasar otros 200 años y se escucharán las mismas excusas "cuando llegamos estaba grande", todos los incendios tienen miles de complicaciones, primero llegar (tacos, un carro que choca, etc), vientos, ocupantes atrapados, fuego desatado y autoventilado, grifos que no funcionan (de verdad), por lo anterior y muchas otras consideraciones es que la gente llama a quienes tienen equipamiento y entrenamiento especializado para no quedar como cualquier vecino viendo como las llamas arrasan con todo.
Hasta el momento, incendio tras incendio leemos "estamos entrenando para que esto no se repita", "la Comandancia ha implementado nuevas órdenes", "hicimos nuestro mayor esfuerzo".
Lo que cualquiera espera es que al llegar a un incendio, quienes llegan hagan algo útil.
Todos los CCBB deberían entrenar para mantener mínimo absoluto 4.000 lpm a los 15 minutos de darse la orden. Absolutamente todas las ciudades del país tienen buena fuente de agua, hay que entrenar para aprovecharlas. Dicho entrenamiento además servirá para ver cuales son las falencias, que equipos comprar, que entrenamiento reforzar, y servirá para presentarlo como base a la hora de postular a algún proyecto de fondos.