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Un voraz incendio destruyó ayer en la tarde por completo el tradicional restaurante La Pincoya, ubicado en el kilómetro 9 de la Ruta 9 Sur, en la comuna de Punta Arenas.
El siniestro se originó cuando el propietario del local, Victor Trelles, se encontraba realizando la instalación de un equipo de amplificación de sonido en la sala de baile, lo que provocó un corte de energía. El propietario habría vuelto a dar la luz, pero los equipos no encendían, por lo que partió a buscar ayuda de un electricista cerca de las 18horas. Al volver al local, luego de breves minutos, las llamas se habían desatado.
Baja presión
En instantes, personal de Bomberos arribó al lugar del siniestro. El accionar de los voluntarios se centró en controlar las llamas y tratar de que no se propaguen a las cabañas del motel Malibú ni a las embarcaciones menores ubicadas en el costado sur del local.
Las labores se hacían muy dificultosas, ya que encima de las flamas se encontraban numerosas ramas de imponentes árboles que amenazaban con encenderse.
Luego de casi media hora de arduo esfuerzo, las tareas por mitigar el siniestro parecían exitosas y el fuego fue parcialmente extinguido.
Sin embargo, en esos instantes sucedió lo inesperado: el agua se agotó. Mientras Bomberos trataba de normalizar la situación, nuevamente el incendio se desató, pero esta vez con mayor intensidad. Las llamas superaron los 15 metros y se temió por la seguridad de los voluntarios y los curiosos que se encontraban en el lugar, por lo que personal de Carabineros procedió a alejar a las personas y a cerrar la carretera en ambos sentidos.
Los voluntarios continuaban llegando al lugar para combatir el siniestro que no daba tregua.
Baja presión
El incendio provocó daños totales en el local. El comandante de Bomberos Pedro Alvarado informó que al lugar llegaron más de 80 voluntarios y 11 unidades de seis compañías de Punta Arenas.
Alvarado reconoció que el principal obstáculo que debieron sortear fue la escasez de agua que existe en el sector: “Tuvimos que proceder a utilizar agua del estrecho para combatir el fuego. El incendio afectó a más de 200 metros cuadrados de construcción”.
“Fue muy complicada la tarea. El grifo más cercano estaba a unos 1.200 metros del siniestro, por lo que se perdió bastante tiempo en extender y conectar las mangueras. Además, la baja presión nos afectó y pasamos lapsos de seis o siete minutos que no teníamos agua. Afortunadamente, las embarcaciones no se quemaron, tampoco las cabañas vecinas”, dijo el comandante.
Alvarado dijo que los siniestros que se producen en la periferia de Punta Arenas son un grave problema. “Tanto en Río Seco como en el sector sur tenemos dificultades con los grifos, ya que están ubicados cada dos kilómetros”.
Fuente:elpinguino.com
Un voraz incendio destruyó ayer en la tarde por completo el tradicional restaurante La Pincoya, ubicado en el kilómetro 9 de la Ruta 9 Sur, en la comuna de Punta Arenas.
El siniestro se originó cuando el propietario del local, Victor Trelles, se encontraba realizando la instalación de un equipo de amplificación de sonido en la sala de baile, lo que provocó un corte de energía. El propietario habría vuelto a dar la luz, pero los equipos no encendían, por lo que partió a buscar ayuda de un electricista cerca de las 18horas. Al volver al local, luego de breves minutos, las llamas se habían desatado.
Baja presión
En instantes, personal de Bomberos arribó al lugar del siniestro. El accionar de los voluntarios se centró en controlar las llamas y tratar de que no se propaguen a las cabañas del motel Malibú ni a las embarcaciones menores ubicadas en el costado sur del local.
Las labores se hacían muy dificultosas, ya que encima de las flamas se encontraban numerosas ramas de imponentes árboles que amenazaban con encenderse.
Luego de casi media hora de arduo esfuerzo, las tareas por mitigar el siniestro parecían exitosas y el fuego fue parcialmente extinguido.
Sin embargo, en esos instantes sucedió lo inesperado: el agua se agotó. Mientras Bomberos trataba de normalizar la situación, nuevamente el incendio se desató, pero esta vez con mayor intensidad. Las llamas superaron los 15 metros y se temió por la seguridad de los voluntarios y los curiosos que se encontraban en el lugar, por lo que personal de Carabineros procedió a alejar a las personas y a cerrar la carretera en ambos sentidos.
Los voluntarios continuaban llegando al lugar para combatir el siniestro que no daba tregua.
Baja presión
El incendio provocó daños totales en el local. El comandante de Bomberos Pedro Alvarado informó que al lugar llegaron más de 80 voluntarios y 11 unidades de seis compañías de Punta Arenas.
Alvarado reconoció que el principal obstáculo que debieron sortear fue la escasez de agua que existe en el sector: “Tuvimos que proceder a utilizar agua del estrecho para combatir el fuego. El incendio afectó a más de 200 metros cuadrados de construcción”.
“Fue muy complicada la tarea. El grifo más cercano estaba a unos 1.200 metros del siniestro, por lo que se perdió bastante tiempo en extender y conectar las mangueras. Además, la baja presión nos afectó y pasamos lapsos de seis o siete minutos que no teníamos agua. Afortunadamente, las embarcaciones no se quemaron, tampoco las cabañas vecinas”, dijo el comandante.
Alvarado dijo que los siniestros que se producen en la periferia de Punta Arenas son un grave problema. “Tanto en Río Seco como en el sector sur tenemos dificultades con los grifos, ya que están ubicados cada dos kilómetros”.
Fuente:elpinguino.com