Cerca de las seis de la madrugada de ayer se encendieron las alarmas por un incendio que afectó las dependencias de la discoteque Kamikaze de Copiapó. El hecho, se inició como un amago de incendio, sin embargo las llamas se propagaron por todo el local rápidamente, consumiéndolo en su totalidad.
Al lugar, concurrieron la totalidad de las compañías de Bomberos de Copiapó, quienes lucharon por más de dos horas por contener el fuego y evitar que se propagara a viviendas aledañas. También arribó al sitio del suceso el dueño del inmueble, Eduardo Martínez, quien señaló encontrarse tranquilo frente al hecho, descartando de plano la existencia de seguros comprometidos frente a la tragedia que lo afectó.
Carabineros también se hizo presente en el lugar, entrevistando a vecinos del sector quienes habrían señalado sentir ruidos en las inmediaciones del centro nocturno momentos antes de iniciarse las llamas. El dueño del inmueble, señaló además como cifra preliminar de pérdidas un avalúo cercano a los $350 millones. Por su parte, tras sofocar las llamas, Bomberos y Carabineros dieron inicio a las pericias tendientes a establecer las cusas del siniestro, aunque no se descarta la participación de terceros en la génesis del hecho.
Otra de la hipótesis que Bomberos deberá confirmar o descartar es la versión de testigos que señala que las llamas se habría producido en la menos tres focos distintos, lo que -de comprobarse- daría más fuerza a la tesis de la intencionalidad en el hecho.
Diario Chañarcillo