Los orígenes de las actuales máscaras de respiración usadas por los servicios contra incendios
http://www.firemuseumnetwork.org/misc/through_the_smoke.html
Fuente http://www.firemuseumnetwork.org
http://www.firemuseumnetwork.org/misc/through_the_smoke.html
Existe una leyenda acerca de los bigotes de los bomberos como dispositivo de seguridad desde 1800 frente a los incendios.
Los bomberos enroscaban su labio inferior y mojaban sus bigotes, filtrando el aire de su aliento a modo de improvisado filtro.
Lamentablemente no hay ninguna evidencia datada exacta, de cómo se realizaba esta práctica curiosa de trabajo. Tampoco es de extrañar ¿qué servicio data su método de trabajo actualmente? y eso que ya han pasado algo más de 200 años...
Entre los años 1860 a 1870 (año de la Revolución Meiji en Japón) varios dispositivos fueron patentados. "Lacour" introdujo un primer artilugio consistente en una bolsa de aire apretada (no era aire a presión, o sea el aire comprimido de las botellas actuales, aunque sí un antepasado y predecesor directo de los actuales), esta bolsa de aire (colocada en la parte trasera del bombero) se llenaba de aire puro inflado mediante el uso de un par de fuelles.
Otra variante del anterior alojaba bolsas de aire en la chaqueta incombustible del bombero.
Nealy ideó un pariente cercano de la máscara de Darth Vader http://bomberosalcorcon.forum2.biz/index.htm (StarWars) un filtro de aire para el humo con esponjas húmedas y un bolso de agua, llevado alrededor del pecho del bombero.
El resultado final de los años 1890 vieron el desarrollo de "máscaras de humo" - el Vajen-Bader.
UN CASCO ANTI-HUMO SALVA UNA VIDA HUMANA
Reimpreso del Heraldo del Bombero el 25 de marzo de 1897
UN CASCO ANTI-HUMO SALVA UNA VIDA HUMANA
Reimpreso del Heraldo del Bombero el 25 de marzo de 1897
Cuenta la historia que en la tarde del 11 de marzo de una Ciudad de Kansas, en la calle 7I3-717 con ayuda del invento patentado por Vajen-Bader, salvaron la vida de la Señora H. Roberts, en el desarrollo del incendio y extinción del fuego de su vivienda, marcando un antes y un después en la historia de los rescates realizados por Servicios de bomberos.
El incendio comenzó sobre la madrugada 4:30, por culpa de un cigarro mal apagado de un huésped descuidado sobre el tocador, que extendió las llamas por segundos y según la historia, hasta por terceros edificios (no es de extrañar, teniendo en cuenta los materiales de construcción de aquella época y ciudad)
Acto seguido, los bomberos comenzaron a lanzar agua sobre el edificio, la Sra. Roberts abrió la ventana de su habitación de la Calle Central, se asfixiaba por culpa del humo y se disponía a brincar a la acera de abajo, cuando un bombero le "gritó" que aguantara hasta que a través del humo y las llamas llegara hasta ella.
El bombero con su máscara Vajen-Dejan y su casco, caminó a través del humo denso que podía sentir a lo largo de los pasillos. Ya en el cuarto tropezó con el cuerpo en el suelo y sin sentido bajo los efectos del humo de la señora H. Roberts. El bombero cargó con el cuerpo de la señora y la llevó escaleras abajo; ya en la Calle, con el aire fresco, ella se repuso de los efectos del humo.
El Bombero fue recibido entre aplausos por la muchedumbre atraída por el fuego del inmueble que los había reunido.
UN INVENTOR ACERTADO
Reimpreso del Heraldo del Bombero el 9 de septiembre de 1897
Reimpreso del Heraldo del Bombero el 9 de septiembre de 1897
Una imagen, de Sr. Willis C. Vajen, de Indianapolis, Ind. inventor del protector de humos Vajen.
Pocos fueron los Servicios de Bomberos de renombre de "este país" que no usaran el empleo de este casco "anti-humos", y los cuerpos de bomberos de Dublín, Guttenberg, Suecia, Valparaíso, Ají, Saporo, Japón, Wellington, Nueva Zelanda, mostraron su entera satisfacción por el nuevo avance contra incendios.
El casco contaba con una gamuza empapada de agua para que el fuego no lo dañe, relleno sobre la parte inferior con la lana pesada, por la que el aire exhalado se filtra gradualmente, actuando como una parada de presión contra la entrada de aire exterior.
El aire para la respiración del bombero es alojado en un tanque de compresión compacto atado detrás del casco, y es respirable a presión atmosférica.
La temperatura asegurada para la respiración es siempre al menos veinte grados más abajo que la temperatura de la atmósfera circundante en el incendio.
Los visores de los ojos son de mica -proporcionando una visión clara- y agujeros a la altura de los oídos que transmiten el sonido perfectamente.
La cabeza en el interior del casco (tipo escafandra) permanece libre pudiendo girar a ambos lados en el interior del casco.
Sr. Willis C. Vajen -el inventor- se tomó diez años para perfeccionar el dispositivo, después de colocarlo a la venta pasado algo más de un año. Su éxito es debido a la satisfacción final del producto.
Sr. Vajen poseedor de gran ingenio, explicó a cerca de otro descubrimiento, que era posible hacer un diafragma de mica que permitiera transmitir sonidos de voz al oído.
En 1876 fue el primero en el uso de la la mica como tipo de transmisor ordinario
Esto era posible antes de la fecha de la introducción del transmisor de diafragma, ahora ya en uso regular aplicado para usar en el teléfono, el fonógrafo e instrumentos similares
