Niñita sería la pitancera de Cañete
Con una tremenda sorpresa se encontró el telefonista del Cuerpo de Bomberos de Cañete, Oscar Mariñán, cuando supo que la dueña del teléfono del cual lo llaman para molestarlo de madrugada sería nada más y nada menos que una menor de tan sólo 10 años que vive en una zona rural.
Después de casi un mes desde que los "chicos buenos" de la zona de las papas ofrecieran una recompensa de 15 mil pesos a quien diera con la persona que llamaba al número de emergencias (132), la búsqueda fue positiva.
¿Madrugadora?
Según Mariñán, tras el descubrimiento una situación muy rara le pasó. "Desde el celular que me molestaban me llamaron para reclamarme por qué había dado a conocer el número (lo citó en una radio local) y ahora la gente los molestaba a ellos", contó.
Según el telefonista que debía levantarse cada 10 minutos, entre las 2 y 6 de la madrugada, a responder el teléfono de emergencia, es muy difícil que la menor dueña del celular sea la que molesta, pues "un niño no está despierto a esa hora". El telefonista especuló que puede que un adulto le pida el celular y moleste, "pero la niña no creo", dijo Mariñán.
Fuente: Diario Crónica

Con una tremenda sorpresa se encontró el telefonista del Cuerpo de Bomberos de Cañete, Oscar Mariñán, cuando supo que la dueña del teléfono del cual lo llaman para molestarlo de madrugada sería nada más y nada menos que una menor de tan sólo 10 años que vive en una zona rural.
Después de casi un mes desde que los "chicos buenos" de la zona de las papas ofrecieran una recompensa de 15 mil pesos a quien diera con la persona que llamaba al número de emergencias (132), la búsqueda fue positiva.
¿Madrugadora?
Según Mariñán, tras el descubrimiento una situación muy rara le pasó. "Desde el celular que me molestaban me llamaron para reclamarme por qué había dado a conocer el número (lo citó en una radio local) y ahora la gente los molestaba a ellos", contó.
Según el telefonista que debía levantarse cada 10 minutos, entre las 2 y 6 de la madrugada, a responder el teléfono de emergencia, es muy difícil que la menor dueña del celular sea la que molesta, pues "un niño no está despierto a esa hora". El telefonista especuló que puede que un adulto le pida el celular y moleste, "pero la niña no creo", dijo Mariñán.
Fuente: Diario Crónica