Menor de siete años providencialmente salvó con vida al caer a pozo de ocho metros
Expectación provocó en vecinos del sector Algarrobal, el rescate que realizó personal de Bomberos de San Felipe la tarde de ayer, de un menor de siete años que cayó accidentalmente a un pozo abierto para alcantarillado particular, el cual se encontraba sin protección.
SAN FELIPE.- Expectación provocó la tarde de este lunes, en vecinos del sector Algarrobal, el rescate que realizó personal de Bomberos de un menor de siete años que cayó accidentalmente a un pozo abierto para alcantarillado particular, que se encontraba sin protección.
El accidente se registró a las diecisiete treinta horas de este lunes, cuando el menor identificado como Matías Lazcano, de siete años de edad, se encontraba jugando en el pozo -de una profundidad de ocho metros y dos metros de diámetro en su boca- precipitándose de cabeza a su interior.
El pozo ubicado literalmente en el patio delantero del domicilio del menor, está pegado a la vereda norte de la calle "Narciso Sepúlveda" del sector de Algarrobal. Llamativamente el mencionado pozo no contaba con ninguna tapa o medida de seguridad que pudiera prevenir algún tipo de accidente, situación que lógicamente lo transformaba en una verdadera trampa, tanto para los ocupantes de la vivienda, como para los transeúntes, porque tampoco el domicilio cuenta con una reja perimetral hacia la calle.
Familiares del menor accidentado indicaron que el pozo de autoconstrucción recientemente lo habían terminado de abrir y por eso no se había puesto alguna tapa para evitar que alguien cayera a su interior.
El tercer comandante del Cuerpo de Bomberos de San Felipe, Carlos Herrera, que estuvo a cargo del operativo de rescate del menor, señaló que trabajaron en conjunto con el Samu aproximadamente por quince minutos en el lugar para lograr el objetivo: "Tuvimos que bajar a evaluar al niño con dos bomberos al pozo, de aproximadamente ocho metros, bastante complicado porque es angosto, luego instalar una camilla rígida. Cuando llegamos sentimos los gritos del menor y sabíamos que teníamos que trabajar rápido, porque personal del Samu nos informó que estaba con dolores al hombro, las piernas y la columna".
Para personal de Bomberos, Samu y Carabineros que acudió al rescate, las condiciones que presentaba el pozo, sin ninguna protección, estando a la orilla de la calle es algo bastante cuestionable, considerando que esta en una población donde existen bastante menores.
Luego de rescatar al menor, éste fue atendido por varios minutos por personal del Samu en el mismo lugar, al interior de la ambulancia que concurrió a la emergencia, procediendo luego a su traslado al servicio de urgencia del hospital San Camilo, donde posteriormente se informó que éste afortunadamente no presenta ninguna lesión de consideración, quedando de todos modos internado en observación en este centro asistencial.
Fuente: Diario El Trabajo
Expectación provocó en vecinos del sector Algarrobal, el rescate que realizó personal de Bomberos de San Felipe la tarde de ayer, de un menor de siete años que cayó accidentalmente a un pozo abierto para alcantarillado particular, el cual se encontraba sin protección.
SAN FELIPE.- Expectación provocó la tarde de este lunes, en vecinos del sector Algarrobal, el rescate que realizó personal de Bomberos de un menor de siete años que cayó accidentalmente a un pozo abierto para alcantarillado particular, que se encontraba sin protección.
El accidente se registró a las diecisiete treinta horas de este lunes, cuando el menor identificado como Matías Lazcano, de siete años de edad, se encontraba jugando en el pozo -de una profundidad de ocho metros y dos metros de diámetro en su boca- precipitándose de cabeza a su interior.
El pozo ubicado literalmente en el patio delantero del domicilio del menor, está pegado a la vereda norte de la calle "Narciso Sepúlveda" del sector de Algarrobal. Llamativamente el mencionado pozo no contaba con ninguna tapa o medida de seguridad que pudiera prevenir algún tipo de accidente, situación que lógicamente lo transformaba en una verdadera trampa, tanto para los ocupantes de la vivienda, como para los transeúntes, porque tampoco el domicilio cuenta con una reja perimetral hacia la calle.
Familiares del menor accidentado indicaron que el pozo de autoconstrucción recientemente lo habían terminado de abrir y por eso no se había puesto alguna tapa para evitar que alguien cayera a su interior.
El tercer comandante del Cuerpo de Bomberos de San Felipe, Carlos Herrera, que estuvo a cargo del operativo de rescate del menor, señaló que trabajaron en conjunto con el Samu aproximadamente por quince minutos en el lugar para lograr el objetivo: "Tuvimos que bajar a evaluar al niño con dos bomberos al pozo, de aproximadamente ocho metros, bastante complicado porque es angosto, luego instalar una camilla rígida. Cuando llegamos sentimos los gritos del menor y sabíamos que teníamos que trabajar rápido, porque personal del Samu nos informó que estaba con dolores al hombro, las piernas y la columna".
Para personal de Bomberos, Samu y Carabineros que acudió al rescate, las condiciones que presentaba el pozo, sin ninguna protección, estando a la orilla de la calle es algo bastante cuestionable, considerando que esta en una población donde existen bastante menores.
Luego de rescatar al menor, éste fue atendido por varios minutos por personal del Samu en el mismo lugar, al interior de la ambulancia que concurrió a la emergencia, procediendo luego a su traslado al servicio de urgencia del hospital San Camilo, donde posteriormente se informó que éste afortunadamente no presenta ninguna lesión de consideración, quedando de todos modos internado en observación en este centro asistencial.
Fuente: Diario El Trabajo