FAMILIA QUEDA SIN HOGAR
Fue una triste mañana para Luis Quinteros.
Impotente, él y su familia –compuesta por su esposa y dos hijos- vieron cómo, en cosa de minutos, se quedaban literalmente en la calle.
Es que un incendio, cuyo origen aún es un misterio, consumió por completo su hogar, ubicado en la calle Estadio (sector Laguna Esmeralda). La mayor parte de sus enseres fue arrasada por la voracidad de las llamas, que envolvieron el inmueble de material ligero, pese a los intentos desplegados por bomberos de distintas compañías de la comuna, que arribaron para intentar controlar el incendio. La situación se produjo a escasos metros del estadio municipal angelino, donde entrenaba el plantel de Iberia.
Pese a que varios jugadores ayudaron en la emergencia, poco pudieron hacer para evitar la tragedia.
Fuente: Diario La Tribuna
Fue una triste mañana para Luis Quinteros.
Impotente, él y su familia –compuesta por su esposa y dos hijos- vieron cómo, en cosa de minutos, se quedaban literalmente en la calle.
Es que un incendio, cuyo origen aún es un misterio, consumió por completo su hogar, ubicado en la calle Estadio (sector Laguna Esmeralda). La mayor parte de sus enseres fue arrasada por la voracidad de las llamas, que envolvieron el inmueble de material ligero, pese a los intentos desplegados por bomberos de distintas compañías de la comuna, que arribaron para intentar controlar el incendio. La situación se produjo a escasos metros del estadio municipal angelino, donde entrenaba el plantel de Iberia.
Pese a que varios jugadores ayudaron en la emergencia, poco pudieron hacer para evitar la tragedia.
Fuente: Diario La Tribuna