EN EL CENTRO DE LOS ÁNGELES
Millonarias pérdidas dejó incendio que consumió local de muebles y colchones
El Departamento de Estudios Técnicos del Cuerpo de Bomberos investiga las causas que provocaron el siniestro.
Lunes, 03 de Octubre del 2011
Un voluntario del cuerpo de Bomberos lesionado y un local comercial destruído a puertas cerradas, dejó como saldo el incendio registrado en horas de la tarde de ayer, en la intersección de las calles Almagro con Tucapel, en Los Ángeles.
El fuego arrasó con un local de venta de muebles, colchones
y artículos del hogar, en siniestro declarado pasadas las tres de la tarde, y que movilizó a voluntarios de seis compañías del Cuerpo de Bomberos.
El local, de dos niveles, era ocupado hace más de 15 años por los mismos dueños, de Santiago, siendo administrado actualmente por Patricio Escobar, quien circunstancialmente pasaba por el lugar, cuando se declaraba el siniestro, que dejó millonarias pérdidas, las que aún no han sido avaluadas.
Una espesa y densa cortina de humo comenzó a ser visible desde distintos sectores de la ciudad, mientras los voluntarios trabajaban en la extinción de las llamas, provistos de mascarillas de respiración autónoma, dadas las características del material que hacía combustión.
Sillones, sillas y mesas, camas, veladores y colchones de distintas dimensiones hacían combustión, mientras los voluntarios combatían el siniestro desde distintos frentes, para evitar que las llamas se propagaran a locales próximos.
En diálogo con La Tribuna, el comandante de Bomberos, Carlos Aguayo, comentó que las características del siniestro implicaron riesgos, agregando que un voluntario cuartelero resultó con lesiones leves durante las labores de extinción de las llamas.
“El material que se almacena en el comercio implica y enfrenta a distintos riesgos. Efectivamente hoy día, las condiciones y
las características de los distintos materiales da como resultado que, ante un incendio, tengamos la generación de productos de combustión de alta toxicidad, y eso provoca que las columnas de humo sean muy negras. Pero esa es una condición que enfrentamos a diario. No es una condición excepcional”, dijo el comandante de Bomberos, al agregar que “tenemos un incendio donde efectivamente había más carga de productos inflamables, pero la situación no es tan distinta a la que acudimos como bomberos”.
El siniestro provocó alarma y conmoción entre quienes circulaban por el centro de la ciudad, permaneciendo muchas personas en el lugar, hasta que se logró controlar el fuego. “Si esta emergencia
hubiese sido en un día hábil de la semana o en horario peak, la verdad es que la llegada de los recursos de combate se habría complicado. En la práctica, las complicación en la capacidad de extinción inmediata se debieron al producto que se quemaba, y que hacía que la propagación fuera rápida, violenta y tóxica”, detalló el comandante Carlos Aguayo.
Los afectados
Una de las primeras personas en llegar tras la presencia de Bomberos y Carabineros fue Patricio Escobar, quien, circunstancialmente, se encontraba en las cercanías.
Patricio Escobar, que por más de ocho años es el administrador del local siniestrado, manifestó que “pasé por aquí, y estaba Carabineros y Bomberos. El local estaba todo incendiado en sus dos pisos. Estaba todo lleno se muebles, de colchones”, detalló, al agregar que los dueños del negocio son de Santiago.
“Con mi familia, estábamos invitados a almorzar. Pasé a comprar cerca y vi que los Carabineros estaban aquí. Me estacioné, bajé y vi que estaba saliendo humo. Ardió todo rápido”, se lamentó.
En tanto, Ingrid Fiebig, de la “Casa del Menaje”, se trasladó rápido al lugar del siniestro, donde arriendan por más de 15 años. “Nosotros tenemos la Casa del Menaje, que es la nuestra.
No sabemos qué pasó. Nos avisaron y cuando llegamos estaba todo envuelto por el fuego. No sabemos qué pasó ni cómo se inició. Tampoco hemos podido entrar porque se puede formar tiraje entre los locales”, expresó.
Foto casa del menaje
Ingrid Fiebig, comerciante
http://www.diariolatribuna.cl/noticias.php?p_id=36747
Millonarias pérdidas dejó incendio que consumió local de muebles y colchones
El Departamento de Estudios Técnicos del Cuerpo de Bomberos investiga las causas que provocaron el siniestro.
Lunes, 03 de Octubre del 2011
Un voluntario del cuerpo de Bomberos lesionado y un local comercial destruído a puertas cerradas, dejó como saldo el incendio registrado en horas de la tarde de ayer, en la intersección de las calles Almagro con Tucapel, en Los Ángeles.
El fuego arrasó con un local de venta de muebles, colchones
y artículos del hogar, en siniestro declarado pasadas las tres de la tarde, y que movilizó a voluntarios de seis compañías del Cuerpo de Bomberos.
El local, de dos niveles, era ocupado hace más de 15 años por los mismos dueños, de Santiago, siendo administrado actualmente por Patricio Escobar, quien circunstancialmente pasaba por el lugar, cuando se declaraba el siniestro, que dejó millonarias pérdidas, las que aún no han sido avaluadas.
Una espesa y densa cortina de humo comenzó a ser visible desde distintos sectores de la ciudad, mientras los voluntarios trabajaban en la extinción de las llamas, provistos de mascarillas de respiración autónoma, dadas las características del material que hacía combustión.
Sillones, sillas y mesas, camas, veladores y colchones de distintas dimensiones hacían combustión, mientras los voluntarios combatían el siniestro desde distintos frentes, para evitar que las llamas se propagaran a locales próximos.
En diálogo con La Tribuna, el comandante de Bomberos, Carlos Aguayo, comentó que las características del siniestro implicaron riesgos, agregando que un voluntario cuartelero resultó con lesiones leves durante las labores de extinción de las llamas.
“El material que se almacena en el comercio implica y enfrenta a distintos riesgos. Efectivamente hoy día, las condiciones y
las características de los distintos materiales da como resultado que, ante un incendio, tengamos la generación de productos de combustión de alta toxicidad, y eso provoca que las columnas de humo sean muy negras. Pero esa es una condición que enfrentamos a diario. No es una condición excepcional”, dijo el comandante de Bomberos, al agregar que “tenemos un incendio donde efectivamente había más carga de productos inflamables, pero la situación no es tan distinta a la que acudimos como bomberos”.
El siniestro provocó alarma y conmoción entre quienes circulaban por el centro de la ciudad, permaneciendo muchas personas en el lugar, hasta que se logró controlar el fuego. “Si esta emergencia
hubiese sido en un día hábil de la semana o en horario peak, la verdad es que la llegada de los recursos de combate se habría complicado. En la práctica, las complicación en la capacidad de extinción inmediata se debieron al producto que se quemaba, y que hacía que la propagación fuera rápida, violenta y tóxica”, detalló el comandante Carlos Aguayo.
Los afectados
Una de las primeras personas en llegar tras la presencia de Bomberos y Carabineros fue Patricio Escobar, quien, circunstancialmente, se encontraba en las cercanías.
Patricio Escobar, que por más de ocho años es el administrador del local siniestrado, manifestó que “pasé por aquí, y estaba Carabineros y Bomberos. El local estaba todo incendiado en sus dos pisos. Estaba todo lleno se muebles, de colchones”, detalló, al agregar que los dueños del negocio son de Santiago.
“Con mi familia, estábamos invitados a almorzar. Pasé a comprar cerca y vi que los Carabineros estaban aquí. Me estacioné, bajé y vi que estaba saliendo humo. Ardió todo rápido”, se lamentó.
En tanto, Ingrid Fiebig, de la “Casa del Menaje”, se trasladó rápido al lugar del siniestro, donde arriendan por más de 15 años. “Nosotros tenemos la Casa del Menaje, que es la nuestra.
No sabemos qué pasó. Nos avisaron y cuando llegamos estaba todo envuelto por el fuego. No sabemos qué pasó ni cómo se inició. Tampoco hemos podido entrar porque se puede formar tiraje entre los locales”, expresó.
Foto casa del menaje
Ingrid Fiebig, comerciante
http://www.diariolatribuna.cl/noticias.php?p_id=36747
