SE DESPERTO PARA IR AL BAÑO Y SE ENCONTRO CON LAS LLAMAS
Joven de 17 años salvó a sus tres hermanas de morir en incendio
- A la hora de desatarse el siniestro en la vivienda de dos pisos de calle Angamos 1278, un matrimonio y sus cuatro hijos dormían. - Dueño de casa es ejecutivo del Banco de Crédito e Inversiones.
De no mediar el oportuno aviso de un hijo, y la acción heroica que emprendió para salvar a sus hermanas, una familia pudo morir calcinada en el incendio que ayer en la madrugada destruyó parte importante de una vivienda de dos pisos, ubicada en Angamos 1278, entre Quillota y Caupolicán.
A las dos de la mañana, la Central del Cuerpo de Bomberos fue alertada de esta emergencia, despachando cuatro compañías al combate del incendio (1ª, 2ª, 4ª y 7ª). Más de 40 voluntarios trabajaron arduamente en la extinción de las llamas que a ratos, incluso, estuvieron a punto de extenderse a dependencias vecinas.
El dueño de casa, ejecutivo del Banco de Crédito e Inversiones, Javier Sánchez Lagos, su esposa y sus cuatro hijos (de 9, 15, 17 y 23 años de edad) dormían cuando fueron despertados por los gritos de Javier, el único hijo varón del matrimonio, de 17 años.
Una providencial levantada al baño le permitió al joven estudiante percatarse de la presencia de las llamas. Esto, porque para cumplir su objetivo debía bajar al primer nivel, caminata que resultaría crucial para alertar a su familia de la tragedia que se les venía.
El papá destacó la heroica actitud de su “lolo” que apenas se encontró con las llamas lo primero que atinó fue a gritar y despertar a sus hermanas. “Les pidió que abandonaran la casa por el techo del lado norte, mientras él salía por el patio para colocar una escalera (tipo carpintero), por la cual afortunadamente pudieron bajar. Mientras tanto yo trataba de sacar una reja de nuestro dormitorio, que también daba al lado norte, y que fue lo que finalmente nos permitió salir”.
En esos instantes, el fuego aumentó considerablemente debido al “tiraje” que provocó la rotura del vidrio de la ventana del dormitorio del primer piso por donde escapó el matrimonio.
Después de la traumática experiencia vivida, y las muestras de solidaridad que recibió, más que nunca esta familia valora aquella frase de que “lo material es siempre recuperable, no así la vida de las personas”.
Pero la “suerte” estaba de parte de esta familia, ya que otro gran azar o coincidencia fue que la hija de 15 decidiera justo esa noche dormir con su hermana mayor, Milena, porque había mucho frío. El dormitorio daba al lado norte y que fue lo que finalmente permitió que su hermano Javier pudiera rescatarlas con vida desde el segundo piso.
“NO SE LO DOY
A NADIE”
Javier Sánchez entiende que a esta altura lo único importante para él es que su grupo familiar está bien. Aunque remarca que “esta experiencia no se la doy a nadie”
Situaciones como éstas suceden muy rápido, pero lo principal en estos momentos es agradecerle a su hijo la actitud heroica. Este incendio le cambió la forma de ver la vida, “porque al final lo único que cuenta es que la familia esté bien; ya que de nada serviría un seguro, por ejemplo, si uno perdiera a alguien”.
Mucha gente, colegas de trabajo, amigos y familiares que están en otras partes del país los han estado llamando para expresarle todo su apoyo y solidaridad.
El comandante del Cuerpo de Bomberos, René Mancilla, informó que dos horas demoraron en controlar por completo la situación. Y que, según los primeros peritajes, la causa del incendio estuvo en una sobrecarga del sistema eléctrico, a la altura del cielorraso.
Incluso vecinos ayudaron a sacar las mascotas del local colindante con la vivienda siniestrada, sobre todo las aves y otros animales, que fueron metidos en jaulas.
FUENTE: LA PRENSA AUSTRAL
Joven de 17 años salvó a sus tres hermanas de morir en incendio
- A la hora de desatarse el siniestro en la vivienda de dos pisos de calle Angamos 1278, un matrimonio y sus cuatro hijos dormían. - Dueño de casa es ejecutivo del Banco de Crédito e Inversiones.
De no mediar el oportuno aviso de un hijo, y la acción heroica que emprendió para salvar a sus hermanas, una familia pudo morir calcinada en el incendio que ayer en la madrugada destruyó parte importante de una vivienda de dos pisos, ubicada en Angamos 1278, entre Quillota y Caupolicán.
A las dos de la mañana, la Central del Cuerpo de Bomberos fue alertada de esta emergencia, despachando cuatro compañías al combate del incendio (1ª, 2ª, 4ª y 7ª). Más de 40 voluntarios trabajaron arduamente en la extinción de las llamas que a ratos, incluso, estuvieron a punto de extenderse a dependencias vecinas.
El dueño de casa, ejecutivo del Banco de Crédito e Inversiones, Javier Sánchez Lagos, su esposa y sus cuatro hijos (de 9, 15, 17 y 23 años de edad) dormían cuando fueron despertados por los gritos de Javier, el único hijo varón del matrimonio, de 17 años.
Una providencial levantada al baño le permitió al joven estudiante percatarse de la presencia de las llamas. Esto, porque para cumplir su objetivo debía bajar al primer nivel, caminata que resultaría crucial para alertar a su familia de la tragedia que se les venía.
El papá destacó la heroica actitud de su “lolo” que apenas se encontró con las llamas lo primero que atinó fue a gritar y despertar a sus hermanas. “Les pidió que abandonaran la casa por el techo del lado norte, mientras él salía por el patio para colocar una escalera (tipo carpintero), por la cual afortunadamente pudieron bajar. Mientras tanto yo trataba de sacar una reja de nuestro dormitorio, que también daba al lado norte, y que fue lo que finalmente nos permitió salir”.
En esos instantes, el fuego aumentó considerablemente debido al “tiraje” que provocó la rotura del vidrio de la ventana del dormitorio del primer piso por donde escapó el matrimonio.
Después de la traumática experiencia vivida, y las muestras de solidaridad que recibió, más que nunca esta familia valora aquella frase de que “lo material es siempre recuperable, no así la vida de las personas”.
Pero la “suerte” estaba de parte de esta familia, ya que otro gran azar o coincidencia fue que la hija de 15 decidiera justo esa noche dormir con su hermana mayor, Milena, porque había mucho frío. El dormitorio daba al lado norte y que fue lo que finalmente permitió que su hermano Javier pudiera rescatarlas con vida desde el segundo piso.
“NO SE LO DOY
A NADIE”
Javier Sánchez entiende que a esta altura lo único importante para él es que su grupo familiar está bien. Aunque remarca que “esta experiencia no se la doy a nadie”
Situaciones como éstas suceden muy rápido, pero lo principal en estos momentos es agradecerle a su hijo la actitud heroica. Este incendio le cambió la forma de ver la vida, “porque al final lo único que cuenta es que la familia esté bien; ya que de nada serviría un seguro, por ejemplo, si uno perdiera a alguien”.
Mucha gente, colegas de trabajo, amigos y familiares que están en otras partes del país los han estado llamando para expresarle todo su apoyo y solidaridad.
El comandante del Cuerpo de Bomberos, René Mancilla, informó que dos horas demoraron en controlar por completo la situación. Y que, según los primeros peritajes, la causa del incendio estuvo en una sobrecarga del sistema eléctrico, a la altura del cielorraso.
Incluso vecinos ayudaron a sacar las mascotas del local colindante con la vivienda siniestrada, sobre todo las aves y otros animales, que fueron metidos en jaulas.
FUENTE: LA PRENSA AUSTRAL