Día Nacional del Bombero
El 30 de junio, por Ley 14.866 en 1962, se instituyó el Día Nacional del Bombero, fecha por la cual también se crea el año 1970 la Junta Nacional de Cuerpo de Bomberos de Chile. En ese día, los cuerpos de bomberos del país rinden un sincero homenaje a sus voluntarios por su día nacional.
En todas las ciudades del mundo civilizado existe cuerpos de bomberos organizados y algunos de ellos en forma admirable. En Chile es una institución nacional con el nombre genérico de cuerpos, los que se organizan y actúan sobre bases en más de 200 ciudades y tienen una característica que los distinguen y que en su más alto galardón: su voluntariedad.
Los bomberos tienen un pasado que se identifica con la historia de la patria. La Primera Compañía de Bomberos de Chile fue fundada en Valparaíso en 1850 y tuvo su origen a raíz de un voraz incendio que arrasó con una cuarta parte del corazón de ese puerto. En todas partes del mundo hay bomberos voluntarios que realizan labores de apoyo de los bomberos pagados. Sin embargo, las características que más sorprenden a los extranjeros y que motiva un verdadero orgullo para todos los chilenos, es que en nuestro país solo existen bomberos voluntarios, que no reciben remuneración alguna por el trabajo que realizan.
Por esta cualidad de los bomberos, Chile es reconocido a nivel mundial en relación al servicio que existe en muchos otros países de América Latina, estando considerado entre los mejores del mundo. Hoy Chile cuenta con más de 50 mil bomberos agrupados en 300 Cuerpos, que se mantienen fieles a los principios y tradiciones que tuvieron sus fundadores hace ya más de 150 años, pero renovándose y modernizándose para darnos así un servicio eficiente y profesional.
El Cuerpo de Bomberos de nuestra ciudad lo componen esforzados, disciplinados, eficientes y valerosos voluntarios que en cualquier momento, a cualquier hora del día o de la noche, abandonan presurosos sus quehaceres o interrumpen sus horas de descanso, para concurrir sin reparar en peligros al lugar en que se requiera su humanitaria intervención.
Muchos cambios han ocurrido en el transcurso del historial bomberil iquiqueño. En antaño las fuentes de agua que se utilizaban para combatir los incendios eran de grifos con agua salada, cuya red corría por toda la calle Thompson y que se alimentaba del mar en el sector del Morro. Hoy existe una completa red de grifo de agua dulce cubre casi todo el territorio de la ciudad, incluso se hicieron construir pozos de emergencia en diversos sectores de la ciudad para contar más rápidamente con agua para atacar cualquier siniestro.
Antes las alarmas eran dadas por las campanas de las iglesias, sistema que ahora se cambió por los más modernos sistemas de radiocomunicaciones. Las primitivas bombas a palanca y las que empleaban la fuerza del vapor, han sido reemplazadas por bombas automóviles. Un pequeño reducido número de voluntarios que formaron en sus comienzos este cuerpo hoy son más de 500 habiendo pasado por sus filas importantes y connotados hombres públicos y de empresas.
Hoy con mucho orgullo están recibiendo modernos carros bombas cero kilómetros, considerados como los más modernos del país. También los bomberos reciben orientación en materia de estrategia táctica y comando de emergencia.
Grandes han sido los cambios, pero la evolución producida no ha hecho cambiar el ideal ni la mística que legaron sus fundadores, los que siempre atrajeron a la juventud deseosa de prestar sus desinteresados servicios de ayuda a la comunidad cuando golpea a las puertas de los cuarteles. Si de algo esta ciudad puede sentirse orgullosa es de su Cuerpo de Bomberos, jefes, oficialidad y voluntariado han sido siempre un solo organismo con una sola voluntad. Y de esta coordinación ideal ha surgido la institución que dignamente celebra su día nacional.
Expresemos nuestra felicitación en su aniversario a esta benemérita institución de Iquique que está presidida por el Superintendente Tomás Moreno Correa, oficiales, administrativo, directores, capitanes y 400 voluntarios.
Fuente: La Estrella de Iquique
El 30 de junio, por Ley 14.866 en 1962, se instituyó el Día Nacional del Bombero, fecha por la cual también se crea el año 1970 la Junta Nacional de Cuerpo de Bomberos de Chile. En ese día, los cuerpos de bomberos del país rinden un sincero homenaje a sus voluntarios por su día nacional.
En todas las ciudades del mundo civilizado existe cuerpos de bomberos organizados y algunos de ellos en forma admirable. En Chile es una institución nacional con el nombre genérico de cuerpos, los que se organizan y actúan sobre bases en más de 200 ciudades y tienen una característica que los distinguen y que en su más alto galardón: su voluntariedad.
Los bomberos tienen un pasado que se identifica con la historia de la patria. La Primera Compañía de Bomberos de Chile fue fundada en Valparaíso en 1850 y tuvo su origen a raíz de un voraz incendio que arrasó con una cuarta parte del corazón de ese puerto. En todas partes del mundo hay bomberos voluntarios que realizan labores de apoyo de los bomberos pagados. Sin embargo, las características que más sorprenden a los extranjeros y que motiva un verdadero orgullo para todos los chilenos, es que en nuestro país solo existen bomberos voluntarios, que no reciben remuneración alguna por el trabajo que realizan.
Por esta cualidad de los bomberos, Chile es reconocido a nivel mundial en relación al servicio que existe en muchos otros países de América Latina, estando considerado entre los mejores del mundo. Hoy Chile cuenta con más de 50 mil bomberos agrupados en 300 Cuerpos, que se mantienen fieles a los principios y tradiciones que tuvieron sus fundadores hace ya más de 150 años, pero renovándose y modernizándose para darnos así un servicio eficiente y profesional.
El Cuerpo de Bomberos de nuestra ciudad lo componen esforzados, disciplinados, eficientes y valerosos voluntarios que en cualquier momento, a cualquier hora del día o de la noche, abandonan presurosos sus quehaceres o interrumpen sus horas de descanso, para concurrir sin reparar en peligros al lugar en que se requiera su humanitaria intervención.
Muchos cambios han ocurrido en el transcurso del historial bomberil iquiqueño. En antaño las fuentes de agua que se utilizaban para combatir los incendios eran de grifos con agua salada, cuya red corría por toda la calle Thompson y que se alimentaba del mar en el sector del Morro. Hoy existe una completa red de grifo de agua dulce cubre casi todo el territorio de la ciudad, incluso se hicieron construir pozos de emergencia en diversos sectores de la ciudad para contar más rápidamente con agua para atacar cualquier siniestro.
Antes las alarmas eran dadas por las campanas de las iglesias, sistema que ahora se cambió por los más modernos sistemas de radiocomunicaciones. Las primitivas bombas a palanca y las que empleaban la fuerza del vapor, han sido reemplazadas por bombas automóviles. Un pequeño reducido número de voluntarios que formaron en sus comienzos este cuerpo hoy son más de 500 habiendo pasado por sus filas importantes y connotados hombres públicos y de empresas.
Hoy con mucho orgullo están recibiendo modernos carros bombas cero kilómetros, considerados como los más modernos del país. También los bomberos reciben orientación en materia de estrategia táctica y comando de emergencia.
Grandes han sido los cambios, pero la evolución producida no ha hecho cambiar el ideal ni la mística que legaron sus fundadores, los que siempre atrajeron a la juventud deseosa de prestar sus desinteresados servicios de ayuda a la comunidad cuando golpea a las puertas de los cuarteles. Si de algo esta ciudad puede sentirse orgullosa es de su Cuerpo de Bomberos, jefes, oficialidad y voluntariado han sido siempre un solo organismo con una sola voluntad. Y de esta coordinación ideal ha surgido la institución que dignamente celebra su día nacional.
Expresemos nuestra felicitación en su aniversario a esta benemérita institución de Iquique que está presidida por el Superintendente Tomás Moreno Correa, oficiales, administrativo, directores, capitanes y 400 voluntarios.
Fuente: La Estrella de Iquique