Incendios: ¿negligencia o casualidad?
Chimeneas o velas son grandes causantes de llamados que parecen pan de cada día.
El último incendio que azotó a la ciudad histórica el pasado miércoles y que dejó completamente en la c alle a una familia de la población Carol Urzúa, puso al descubierto una alarmante situación en la comuna: las constantes tragedias incendiarias que recurrentemente afectan a familias locales, principalmente modestas, y que se ha traducido en un importante número de damnificados y fallecidos en lo que va corrido del año y que hace plantearse una vital interrogante sobre la negligencia y falta de precaución de los afectados en los orígenes de los siniestros.
FALLECIDOS
En lo que va corrido del año han resultado fallecidas dos personas producto de la llamas. En ambas tragedias la negligencia de las personas perecidas ha sido la causa principal en el origen de los siniestros. Aquí algunos casos.
El 22 de febrero, en la población Carol Urzúa, el fuego devoró por completo un inmueble del sector con Carlos Antinao Solar de 43 años de edad en su interior. La principal causa que barajó bomberos fue que esta persona se había quedado dormida con un cigarrillo encendido. El hombre Falleció calcinado.
Por su parte, la noche del 15 de marzo el caos de apoderó de barrio Leiva. Un incendio destruyó por completo una vivienda de calle Inés de Suárez desatando el descontrol el sector debido a que algunos vecinos no dejaron desarrollar con normalidad la labor a bomberos para extinguir las llamas hiriendo, inclusive, a uno de los funcionarios.
El resultado: un anciano de 88 años calcinado. El origen de las llamas, según explicaba en comandante Hernaldo Astudillo, fue provocado por una vela producto que la pieza en donde alojaba el anciano no existía luz eléctrica. Nuevamente la negligencia cobró fuerza dejando esta vez una nueva victima.
DAMNIFICADOS
El miércoles 11 de abril un voraz incendio redujo a cenizas a una humilde vivienda ubicada en el pasaje Colo - Colo de la población Juan Pablo Segundo. Producto del siniestro cuatro personas resultaron damnificadas.
Pero los casos más preocupantes han ocurrido en la Carol Urzúa. Además del fallecimiento de Carlos Antinao, la tragedia de febrero pasado, también apagó el sueño de muchos años de esfuerzo y sacrificio de su esposa Viviana Obreque, ya que en el inmueble incinerado prestaba servicios de hospedaje y pensión que le permitía generar los recursos económicos con los cuales mantenía a sus dos hijos, una niña de 7 y un joven de 17 años. Hoy deben vivir de allegadas en la casa de su madre.
Otro de los casos, y el más reciente, es el incendio que destruyó la vivienda del “búlgaro”, conocido vecino de la misma población, el pasado miércoles. La principal hipótesis que baraja bomberos sobre la causa de las llamas fue el recalentamiento de un cañón de una estufa a leña mal instalada. Como consecuencia resultaron damnificadas, además del propietario, su sobrino, esposa e hija que vivían junto a él.
Ante este panorama, y considerando que aún queda mucho invierno y las estufas a leña son el principal causante de este tipo de desgracias en esta época del año, así lo afirma el propio Astudillo, lo importante es saber que todos lo incendios pueden evitarse. Lo importante es la prevención que se basa en evitar que se unan los tres elementos que lo constituyen: el combustible, el calor y el oxígeno.
Fuente: Diario Renacer de Arauco
Chimeneas o velas son grandes causantes de llamados que parecen pan de cada día.
El último incendio que azotó a la ciudad histórica el pasado miércoles y que dejó completamente en la c alle a una familia de la población Carol Urzúa, puso al descubierto una alarmante situación en la comuna: las constantes tragedias incendiarias que recurrentemente afectan a familias locales, principalmente modestas, y que se ha traducido en un importante número de damnificados y fallecidos en lo que va corrido del año y que hace plantearse una vital interrogante sobre la negligencia y falta de precaución de los afectados en los orígenes de los siniestros.
FALLECIDOS
En lo que va corrido del año han resultado fallecidas dos personas producto de la llamas. En ambas tragedias la negligencia de las personas perecidas ha sido la causa principal en el origen de los siniestros. Aquí algunos casos.
El 22 de febrero, en la población Carol Urzúa, el fuego devoró por completo un inmueble del sector con Carlos Antinao Solar de 43 años de edad en su interior. La principal causa que barajó bomberos fue que esta persona se había quedado dormida con un cigarrillo encendido. El hombre Falleció calcinado.
Por su parte, la noche del 15 de marzo el caos de apoderó de barrio Leiva. Un incendio destruyó por completo una vivienda de calle Inés de Suárez desatando el descontrol el sector debido a que algunos vecinos no dejaron desarrollar con normalidad la labor a bomberos para extinguir las llamas hiriendo, inclusive, a uno de los funcionarios.
El resultado: un anciano de 88 años calcinado. El origen de las llamas, según explicaba en comandante Hernaldo Astudillo, fue provocado por una vela producto que la pieza en donde alojaba el anciano no existía luz eléctrica. Nuevamente la negligencia cobró fuerza dejando esta vez una nueva victima.
DAMNIFICADOS
El miércoles 11 de abril un voraz incendio redujo a cenizas a una humilde vivienda ubicada en el pasaje Colo - Colo de la población Juan Pablo Segundo. Producto del siniestro cuatro personas resultaron damnificadas.
Pero los casos más preocupantes han ocurrido en la Carol Urzúa. Además del fallecimiento de Carlos Antinao, la tragedia de febrero pasado, también apagó el sueño de muchos años de esfuerzo y sacrificio de su esposa Viviana Obreque, ya que en el inmueble incinerado prestaba servicios de hospedaje y pensión que le permitía generar los recursos económicos con los cuales mantenía a sus dos hijos, una niña de 7 y un joven de 17 años. Hoy deben vivir de allegadas en la casa de su madre.
Otro de los casos, y el más reciente, es el incendio que destruyó la vivienda del “búlgaro”, conocido vecino de la misma población, el pasado miércoles. La principal hipótesis que baraja bomberos sobre la causa de las llamas fue el recalentamiento de un cañón de una estufa a leña mal instalada. Como consecuencia resultaron damnificadas, además del propietario, su sobrino, esposa e hija que vivían junto a él.
Ante este panorama, y considerando que aún queda mucho invierno y las estufas a leña son el principal causante de este tipo de desgracias en esta época del año, así lo afirma el propio Astudillo, lo importante es saber que todos lo incendios pueden evitarse. Lo importante es la prevención que se basa en evitar que se unan los tres elementos que lo constituyen: el combustible, el calor y el oxígeno.
Fuente: Diario Renacer de Arauco