Fuego sin control ya llegó a San Vicente
Cerca de 500 hombres, siete helicópteros y un avión dromedario luchan con el fuego que ya alcanzó a la comuna del Cachapoal.
Pese a los intensos trabajos para sofocarlo, el fuego al parecer está ganando la batalla, las pérdidas son millonarias tanto por el terreno destruido como por recursos que se invierten cada día. El radio de acción del siniestro forestal ya alcanza los 30 kilómetros de perímetro, y las llamas ya cubren la cumbre del cordón que separa Nancagua con San Vicente de Tagua Tagua.
Para intentar controlar el fuego en el lugar trabajan 140 efectivos de CONAF, 147 trabajadores y lugareños de las viñas colindantes y 50 militares del regimiento Colchagua, quienes están tratando de cortar el avance de las llamas, los que son apoyadas por siete helicópteros y dos más que llegarían en las próximas horas al sector del amago, además de un avión dromedario.
En las primeras horas de la mañana de ayer el fuego parecía totalmente controlado, helicópteros y brigadistas trabajaban para lograr sofocarlos completamente, pero un cambio brusco del viento nuevamente hizo brotar el incendio en el sector del Fundo Santa Elena, muy cerca de propiedades lo que alertó a los efectivos de CONAF y bomberos que llegaron al lugar para proteger la viviendas. El jefe operativo de CONAF en la región y encargado de sofocar el incendio, Ricardo Silva, indicó que el fuego está afectando a la comuna de San Vicente y se trabaja en el lugar para contener las llamas, a fin de evitar de que el foco baje y se produzca otro mayor en la comuna del Cachapoal: “en ese sector tenemos matorral abierto con pastizal y en ese lugar podríamos controlar su avance”, indicó.
Sobre las proyecciones técnicas para controlar el incendio el jefe de la CONAF precisó que se prevé que en tres o cuatro días más el fuego podría estar controlado y apagado, pero siempre y cuando las condiciones climáticas lo permitan. En tanto el gobernador Marco Solorza, indicó que el fuego está más controlado pero aún no está extinto totalmente, es por ello que el gobierno ha dispuesto todos los recursos disponibles para sofocar y apagarlo totalmente. “Actualmente estamos trabajando con 12 brigadas de CONAF y brigadas de militares del regimiento Colchagua, además de empresas privada donde sus trabajadores se han unido para controlar y sofocar el siniestro”, explicó.
Durante la mañana el fuego destruyó parcialmente el tendido eléctrico de alta tensión, uno de estos cables cayó a tierra, donde afortunadamente los brigadistas no sufrieron accidente alguno, pero por precaución no pudieron continuar su labor en la zona de los cerros de Rucatalca, en el límite norte de la comuna de Nancagua con San Vicente de Tagua Tagua. El gobernador señaló que una de las torres cedió al fuego y uno de los cables cayó al suelo, es por ello que se coordinó llamando a la empresa responsable de las torres para el corte de energía a fin de que los brigadistas puedan operar con toda seguridad.
Por la gravedad de los hechos un total de 49 efectivos del regimiento Colchagua al mando del segundo comandante de la unidad, mayor Pedro Romero, se unieron a la lucha para intentar sofocar el siniestro, el oficial jefe indicó que los soldados durante invierno fueron capacitados por CONAF. “Estamos trabajando en el sector La Gloria de Yáquil, haciendo corta fuegos”, sostuvo el mayor Romero.
Fuente: Diario El Rancaguino
Cerca de 500 hombres, siete helicópteros y un avión dromedario luchan con el fuego que ya alcanzó a la comuna del Cachapoal.
Pese a los intensos trabajos para sofocarlo, el fuego al parecer está ganando la batalla, las pérdidas son millonarias tanto por el terreno destruido como por recursos que se invierten cada día. El radio de acción del siniestro forestal ya alcanza los 30 kilómetros de perímetro, y las llamas ya cubren la cumbre del cordón que separa Nancagua con San Vicente de Tagua Tagua.
Para intentar controlar el fuego en el lugar trabajan 140 efectivos de CONAF, 147 trabajadores y lugareños de las viñas colindantes y 50 militares del regimiento Colchagua, quienes están tratando de cortar el avance de las llamas, los que son apoyadas por siete helicópteros y dos más que llegarían en las próximas horas al sector del amago, además de un avión dromedario.
En las primeras horas de la mañana de ayer el fuego parecía totalmente controlado, helicópteros y brigadistas trabajaban para lograr sofocarlos completamente, pero un cambio brusco del viento nuevamente hizo brotar el incendio en el sector del Fundo Santa Elena, muy cerca de propiedades lo que alertó a los efectivos de CONAF y bomberos que llegaron al lugar para proteger la viviendas. El jefe operativo de CONAF en la región y encargado de sofocar el incendio, Ricardo Silva, indicó que el fuego está afectando a la comuna de San Vicente y se trabaja en el lugar para contener las llamas, a fin de evitar de que el foco baje y se produzca otro mayor en la comuna del Cachapoal: “en ese sector tenemos matorral abierto con pastizal y en ese lugar podríamos controlar su avance”, indicó.
Sobre las proyecciones técnicas para controlar el incendio el jefe de la CONAF precisó que se prevé que en tres o cuatro días más el fuego podría estar controlado y apagado, pero siempre y cuando las condiciones climáticas lo permitan. En tanto el gobernador Marco Solorza, indicó que el fuego está más controlado pero aún no está extinto totalmente, es por ello que el gobierno ha dispuesto todos los recursos disponibles para sofocar y apagarlo totalmente. “Actualmente estamos trabajando con 12 brigadas de CONAF y brigadas de militares del regimiento Colchagua, además de empresas privada donde sus trabajadores se han unido para controlar y sofocar el siniestro”, explicó.
Durante la mañana el fuego destruyó parcialmente el tendido eléctrico de alta tensión, uno de estos cables cayó a tierra, donde afortunadamente los brigadistas no sufrieron accidente alguno, pero por precaución no pudieron continuar su labor en la zona de los cerros de Rucatalca, en el límite norte de la comuna de Nancagua con San Vicente de Tagua Tagua. El gobernador señaló que una de las torres cedió al fuego y uno de los cables cayó al suelo, es por ello que se coordinó llamando a la empresa responsable de las torres para el corte de energía a fin de que los brigadistas puedan operar con toda seguridad.
Por la gravedad de los hechos un total de 49 efectivos del regimiento Colchagua al mando del segundo comandante de la unidad, mayor Pedro Romero, se unieron a la lucha para intentar sofocar el siniestro, el oficial jefe indicó que los soldados durante invierno fueron capacitados por CONAF. “Estamos trabajando en el sector La Gloria de Yáquil, haciendo corta fuegos”, sostuvo el mayor Romero.
Fuente: Diario El Rancaguino