Denuncian Graves Irregularidades en el Cuerpo de Bomberos de San Fernando
Acusación fue hecha por oficiales expulsados
SAN FERNANDO.- Una serie de irregularidades en las que habría incurrido el actual Superintendente del Cuerpo de Bomberos de San Fernando, Luis Riquelme Maturana, denunciaron los cuatro oficiales de la Segunda Compañía Bomba Chile-España de esta ciudad, que a fines del año pasado fueron expulsados por faltas administrativas.
En conferencia de prensa, los ex voluntarios, Enrique González, quien se desempañaba como director de la Compañía; Fernando Lizama Bustamente, ex tesorero; Patricio Lizama Baltra, ex secretario, y Ariel Martínez, ex capitán; dieron a conocer una declaración pública en la que además de rechazar la medida adoptada por Luis Riquelme, la que calificaron como arbitraria, antirreglamentaria e ilegal, hicieron una fuerte acusación contra el actual Superintendente.
"El señor Riquelme, ha violado el artículo 111 del reglamento general de la institución que prohíbe ventilar casos bomberiles a la prensa cayendo en una falta administrativa grave. Asimismo, ésta es la primera vez en la historia del Cuerpo de Bomberos de San Fernando, que se hace escarnio público de sus integrantes, sometiéndolos a medidas disciplinarias, que contrastan violentamente con hechos gravísimos ocurridos al interior de la institución y que hasta la fecha no han sido ventilados en la prensa, como por ejemplo el caso de los voluntarios de la Primera Compañía, que fueron acusados de hurtar accesorios de un carro bomba de Peralillo, situación denunciada, comprobada y reconocida por los involucrados, siendo éstos voluntarios "premiados" con una simple medida de suspensión, habiendo regresado en la actualidad a las filas de la institución", sostuvieron los voluntarios expulsados.
En la oportunidad, agregaron que "tampoco se tuvo conocimiento público que en enero pasado, Luis Riquelme estuvo renunciado por todo el mes junto a parte de su directorio, después de haber sido agredido en una reunión al interior del cuartel, en forma física y verbal por voluntarios de su compañía, estando este hecho impune a la fecha, transgrediendo la disciplina del Cuerpo en su forma y su fondo".
Otra de las situaciones denunciadas tiene relación con el daño, que según ellos, provocó la escala mecánica del cuerpo que hace un tiempo cortó cables de alta tensión en el centro de esta ciudad, "exponiendo con ello a grave peligro a los voluntarios presentes en el lugar al igual que al público que se encontraba presente, hecho que también quedó impune pues el involucrado era el Comandante de la institución, Juan Cornejo, integrante de la Primera Compañía, la misma a la que pertenece el Superintendente".
En otro de los puntos señalados en la declaración leída por quienes hasta el año pasado formaron parte de la plana mayor de la Bomba Chile-España, se indica que "llama la atención que el director interventor de la unidad sea el Vicesuperintendente de la institución, Sergio Córdova, presidente de la comisión revisora de libros del Cuerpo de Bomberos, voluntario de la Primera Compañía, quien tiene y ha tenido la información necesaria del proceder contable de la compañía en los años que se cuestionan; y es este mismo personero quien fue expulsado de la institución en el año 1986 por apropiación indebida de dinero mientras ejercía el cargo de Director de la Primera Compañía".
Otras de las acusaciones que se le hace a Luis Riquelme, es que haciendo uso de su profesión de médico, aprobó como voluntario a una persona que padece de epilepsia, vulnerando el reglamento sobre requisitos para bombero. Así también, lo cuestionan sobre la llegada de una camioneta a la Comandancia, supuestamente donada por la empresa Tur-Bus, después del accidente del puente Tinguiririca. "No sabemos cuál fue su costo, quién la adquirió, de dónde salieron los dineros y cómo se usaron éstos. Sólo apareció un día traída por el Comandante de la institución".
En la extensa declaración firmada por los ex voluntarios se denuncia además, que la autoridad competente habría dado un poder a Luis Riquelme, para manejar vehículos de emergencia con clase B, y se refiere también a la situación del asesor jurídico de la Segunda Compañía y por ende del cuerpo, Fernando Contador. "Él fue cesado de su cargo de asesor legal, motivado por el hecho de haber sido patrocinante del recurso presentado a la Corte de Apelaciones por los oficiales expulsados".
Intervención de la Segunda Compañía
Respecto de este tema, los ex voluntarios insistieron que ésa fue una medida antirreglamentaria e ilegal. "El artículo 9 del estatuto establece que cada compañía elegirá su oficialidad por lo que el directorio general no tiene atribución alguna de intervenir y menos nombrar oficiales, toda vez que el estatuto es la columna vertebral del reglamento. Nos llama la atención en este caso, que el Banco Chile de la ciudad, haya aceptado el cambio de firmas, para operar la cuenta corriente de la unidad y los recursos económicos de la compañía, siendo que acá hay una situación legal anómala, que transgrede el decreto ley 110 del año 1979 sobre corporaciones con personería jurídica, situación que los señores asesores jurídicos deben aclarar a las autoridades del cuerpo".
Finalmente, los denunciantes solicitan a las autoridades comunales y provinciales asumir y exigir el reglamento de manejo de la institución y a las autoridades de bomberos regionales y nacionales, hacer una seria investigación ante los hechos expuestos.
.jpg)
Una serie graves acusaciones en contra del Superintendente de Bomberos hicieron ayer los cuatro oficiales que fueron expulsados de la Segunda Compañía por faltas administrativas.
Fuente: www.diarioviregion.cl
Acusación fue hecha por oficiales expulsados
SAN FERNANDO.- Una serie de irregularidades en las que habría incurrido el actual Superintendente del Cuerpo de Bomberos de San Fernando, Luis Riquelme Maturana, denunciaron los cuatro oficiales de la Segunda Compañía Bomba Chile-España de esta ciudad, que a fines del año pasado fueron expulsados por faltas administrativas.
En conferencia de prensa, los ex voluntarios, Enrique González, quien se desempañaba como director de la Compañía; Fernando Lizama Bustamente, ex tesorero; Patricio Lizama Baltra, ex secretario, y Ariel Martínez, ex capitán; dieron a conocer una declaración pública en la que además de rechazar la medida adoptada por Luis Riquelme, la que calificaron como arbitraria, antirreglamentaria e ilegal, hicieron una fuerte acusación contra el actual Superintendente.
"El señor Riquelme, ha violado el artículo 111 del reglamento general de la institución que prohíbe ventilar casos bomberiles a la prensa cayendo en una falta administrativa grave. Asimismo, ésta es la primera vez en la historia del Cuerpo de Bomberos de San Fernando, que se hace escarnio público de sus integrantes, sometiéndolos a medidas disciplinarias, que contrastan violentamente con hechos gravísimos ocurridos al interior de la institución y que hasta la fecha no han sido ventilados en la prensa, como por ejemplo el caso de los voluntarios de la Primera Compañía, que fueron acusados de hurtar accesorios de un carro bomba de Peralillo, situación denunciada, comprobada y reconocida por los involucrados, siendo éstos voluntarios "premiados" con una simple medida de suspensión, habiendo regresado en la actualidad a las filas de la institución", sostuvieron los voluntarios expulsados.
En la oportunidad, agregaron que "tampoco se tuvo conocimiento público que en enero pasado, Luis Riquelme estuvo renunciado por todo el mes junto a parte de su directorio, después de haber sido agredido en una reunión al interior del cuartel, en forma física y verbal por voluntarios de su compañía, estando este hecho impune a la fecha, transgrediendo la disciplina del Cuerpo en su forma y su fondo".
Otra de las situaciones denunciadas tiene relación con el daño, que según ellos, provocó la escala mecánica del cuerpo que hace un tiempo cortó cables de alta tensión en el centro de esta ciudad, "exponiendo con ello a grave peligro a los voluntarios presentes en el lugar al igual que al público que se encontraba presente, hecho que también quedó impune pues el involucrado era el Comandante de la institución, Juan Cornejo, integrante de la Primera Compañía, la misma a la que pertenece el Superintendente".
En otro de los puntos señalados en la declaración leída por quienes hasta el año pasado formaron parte de la plana mayor de la Bomba Chile-España, se indica que "llama la atención que el director interventor de la unidad sea el Vicesuperintendente de la institución, Sergio Córdova, presidente de la comisión revisora de libros del Cuerpo de Bomberos, voluntario de la Primera Compañía, quien tiene y ha tenido la información necesaria del proceder contable de la compañía en los años que se cuestionan; y es este mismo personero quien fue expulsado de la institución en el año 1986 por apropiación indebida de dinero mientras ejercía el cargo de Director de la Primera Compañía".
Otras de las acusaciones que se le hace a Luis Riquelme, es que haciendo uso de su profesión de médico, aprobó como voluntario a una persona que padece de epilepsia, vulnerando el reglamento sobre requisitos para bombero. Así también, lo cuestionan sobre la llegada de una camioneta a la Comandancia, supuestamente donada por la empresa Tur-Bus, después del accidente del puente Tinguiririca. "No sabemos cuál fue su costo, quién la adquirió, de dónde salieron los dineros y cómo se usaron éstos. Sólo apareció un día traída por el Comandante de la institución".
En la extensa declaración firmada por los ex voluntarios se denuncia además, que la autoridad competente habría dado un poder a Luis Riquelme, para manejar vehículos de emergencia con clase B, y se refiere también a la situación del asesor jurídico de la Segunda Compañía y por ende del cuerpo, Fernando Contador. "Él fue cesado de su cargo de asesor legal, motivado por el hecho de haber sido patrocinante del recurso presentado a la Corte de Apelaciones por los oficiales expulsados".
Intervención de la Segunda Compañía
Respecto de este tema, los ex voluntarios insistieron que ésa fue una medida antirreglamentaria e ilegal. "El artículo 9 del estatuto establece que cada compañía elegirá su oficialidad por lo que el directorio general no tiene atribución alguna de intervenir y menos nombrar oficiales, toda vez que el estatuto es la columna vertebral del reglamento. Nos llama la atención en este caso, que el Banco Chile de la ciudad, haya aceptado el cambio de firmas, para operar la cuenta corriente de la unidad y los recursos económicos de la compañía, siendo que acá hay una situación legal anómala, que transgrede el decreto ley 110 del año 1979 sobre corporaciones con personería jurídica, situación que los señores asesores jurídicos deben aclarar a las autoridades del cuerpo".
Finalmente, los denunciantes solicitan a las autoridades comunales y provinciales asumir y exigir el reglamento de manejo de la institución y a las autoridades de bomberos regionales y nacionales, hacer una seria investigación ante los hechos expuestos.
Una serie graves acusaciones en contra del Superintendente de Bomberos hicieron ayer los cuatro oficiales que fueron expulsados de la Segunda Compañía por faltas administrativas.
Fuente: www.diarioviregion.cl
