Edificios, peligro en altura
El incendio en la Torre Prat puso en el tapete la interrogante ¿Estamos preparados para un siniestro de este tipo?
Un dato: El cuerpo de Bomberos de Concepción realiza inspecciones a los edificios que lo requieran por un valor máximo de 350 mil pesos. El dinero puede ser cancelado hasta en noventa días. Una cifra razonable de pagar con ahorro y unión entre los habitantes de un inmueble y que puede entregar más tranquilidad a las familias.
Sólo con una escalera telescópica de 32 metros cuenta Bomberos de Concepción. De hecho, para llevarla a Talcahuano y combatir el fuego en la Torre Prat, el miércoles, los voluntarios debieron ir a San Pedro de la Paz para retirarla del taller donde se encontraba en mantención.
Un dato preocupante si se considera que la ciudad está creciendo en altura y que pronto tendrá la más imponente torre de la región con 27 pisos y 112 metros.
Varios dramas
Sin embargo y aunque no lo crea, éste es un problema pequeño frente a las verdaderas bombas de tiempo que son los obsoletos sistemas de seguridad de los viejos edificios del centro penquista.
Según el tercer comandante del Cuerpo de Bomberos de Concepción, Ian Argo Inch, lo de la escalera es un tema menor, pues "una edificación en altura se trabaja por el interior", explicó. "No saco nada con instalar una escala telescópica o un brazo hidráulico si no tengo un plan coordinado por el interior del edificio, que es en lo que Bomberos se ha especializado desde hace años", dijo. Enumeró trabajos exitosos como el incendio del pirómano en el Hospital Regional o en el Edificio Quinto Centenario.
Reconoció que la labor en altura tiene dificultades, pero no mayores que un edificio que no tiene vías de escape o están bloqueadas o en que la gente no sabe qué hacer frente a una emergencia, que no son pocos.
Inmuebles viejos son amenaza
Hoy día las municipalidades exigen a las constructoras un informe de Bomberos para aprobar el inmueble que construirán, por eso los que realmente constituyen un peligro son aquellos más antiguos, obsoletos en cuanto a prevención.
José vive en una de las clásicas moles de cemento del centro. En una torre ubicada en Aníbal Pinto, a pasos de la plaza. Él, como muchos, ve restringido el acceso a su edificio al horario de las galerías comerciales que hay debajo. "Acá si hay un incendio, hay una reja que bloquea el acceso a los bomberos y hay departamentos que no dan a la calle", explicó.
El tercer comandante, Ian Argo, explicó que hay fallas impensables en muchos inmuebles, por lo que destacó la importancia de que los vecinos se organicen.
"Lo que tienen que hacer es poder tener un buen sistema de comunicación con las administraciones, que debieran tener un buen plan de evacuación vigente. Si un edificio cuenta con red seca, red húmeda, con detectores de humo, regadores automáticos, una zona vertical de seguridad", señaló.
Fuente: Diario Crónica
El incendio en la Torre Prat puso en el tapete la interrogante ¿Estamos preparados para un siniestro de este tipo?
Un dato: El cuerpo de Bomberos de Concepción realiza inspecciones a los edificios que lo requieran por un valor máximo de 350 mil pesos. El dinero puede ser cancelado hasta en noventa días. Una cifra razonable de pagar con ahorro y unión entre los habitantes de un inmueble y que puede entregar más tranquilidad a las familias.
Sólo con una escalera telescópica de 32 metros cuenta Bomberos de Concepción. De hecho, para llevarla a Talcahuano y combatir el fuego en la Torre Prat, el miércoles, los voluntarios debieron ir a San Pedro de la Paz para retirarla del taller donde se encontraba en mantención.
Un dato preocupante si se considera que la ciudad está creciendo en altura y que pronto tendrá la más imponente torre de la región con 27 pisos y 112 metros.
Varios dramas
Sin embargo y aunque no lo crea, éste es un problema pequeño frente a las verdaderas bombas de tiempo que son los obsoletos sistemas de seguridad de los viejos edificios del centro penquista.
Según el tercer comandante del Cuerpo de Bomberos de Concepción, Ian Argo Inch, lo de la escalera es un tema menor, pues "una edificación en altura se trabaja por el interior", explicó. "No saco nada con instalar una escala telescópica o un brazo hidráulico si no tengo un plan coordinado por el interior del edificio, que es en lo que Bomberos se ha especializado desde hace años", dijo. Enumeró trabajos exitosos como el incendio del pirómano en el Hospital Regional o en el Edificio Quinto Centenario.
Reconoció que la labor en altura tiene dificultades, pero no mayores que un edificio que no tiene vías de escape o están bloqueadas o en que la gente no sabe qué hacer frente a una emergencia, que no son pocos.
Inmuebles viejos son amenaza
Hoy día las municipalidades exigen a las constructoras un informe de Bomberos para aprobar el inmueble que construirán, por eso los que realmente constituyen un peligro son aquellos más antiguos, obsoletos en cuanto a prevención.
José vive en una de las clásicas moles de cemento del centro. En una torre ubicada en Aníbal Pinto, a pasos de la plaza. Él, como muchos, ve restringido el acceso a su edificio al horario de las galerías comerciales que hay debajo. "Acá si hay un incendio, hay una reja que bloquea el acceso a los bomberos y hay departamentos que no dan a la calle", explicó.
El tercer comandante, Ian Argo, explicó que hay fallas impensables en muchos inmuebles, por lo que destacó la importancia de que los vecinos se organicen.
"Lo que tienen que hacer es poder tener un buen sistema de comunicación con las administraciones, que debieran tener un buen plan de evacuación vigente. Si un edificio cuenta con red seca, red húmeda, con detectores de humo, regadores automáticos, una zona vertical de seguridad", señaló.
Fuente: Diario Crónica