Mala suerte quemó furgón
COLLIPULLI- Un furgón en que su propietario, Luis Ferrada Hernández, se ganaba la vida quedó parcialmente destruido e inutilizado en la Población Venecia, al incendiarse producto de un cilindro de gas encendido que un cuñado lanzó fuera de la cocina al sufrir un desperfecto que hizo que las llamas quemaran la manguera, parte de una pared y algunos utensilios.
La mala suerte quiso que el cilindro cayera bajo el vehículo produciendo el incendio y su destrucción, cuyos daños no fueron avaluados.
El siniestro, que afortunadamente no tuvo mayores consecuencias, ya que no alcanzó a afectar el inmueble, ocurrió en la tarde cuando la dueña de casa, Marta Sanhueza, que preparaba algunos alimentos, dio el gas y encendió un fósforo.
"Inmediatamente vino una especie de explosión y comenzó a arder la manguera del gas y todo se llenó de llamas y humo. En ese momento, mi sobrino Claudio agarró el balón y lo lanzó afuera, el cual cayó en el furgón"
El sobrino resultó con parte de su cabello chamuscado al haber tomado el balón que despedía fuertes llamaradas, que incluso alcanzaron a quemar parte de la pared del cobertizo donde estaba el vehículo.
Hay que señalar que el furgón fue empujado hacia la calle donde fue apagado por bomberos.
Fuente: Diario Renacer de Angol
COLLIPULLI- Un furgón en que su propietario, Luis Ferrada Hernández, se ganaba la vida quedó parcialmente destruido e inutilizado en la Población Venecia, al incendiarse producto de un cilindro de gas encendido que un cuñado lanzó fuera de la cocina al sufrir un desperfecto que hizo que las llamas quemaran la manguera, parte de una pared y algunos utensilios.
La mala suerte quiso que el cilindro cayera bajo el vehículo produciendo el incendio y su destrucción, cuyos daños no fueron avaluados.
El siniestro, que afortunadamente no tuvo mayores consecuencias, ya que no alcanzó a afectar el inmueble, ocurrió en la tarde cuando la dueña de casa, Marta Sanhueza, que preparaba algunos alimentos, dio el gas y encendió un fósforo.
"Inmediatamente vino una especie de explosión y comenzó a arder la manguera del gas y todo se llenó de llamas y humo. En ese momento, mi sobrino Claudio agarró el balón y lo lanzó afuera, el cual cayó en el furgón"
El sobrino resultó con parte de su cabello chamuscado al haber tomado el balón que despedía fuertes llamaradas, que incluso alcanzaron a quemar parte de la pared del cobertizo donde estaba el vehículo.
Hay que señalar que el furgón fue empujado hacia la calle donde fue apagado por bomberos.
Fuente: Diario Renacer de Angol