Nadie sabía qué ocurría a las 20 horas del miércoles pasado. María Belén volvía de la Universidad, y no pudo acceder a su casa, frente a la cárcel de Chillán, pues estaba todo cortado. Había carabineros, bomberos y mucho humo.
“Lo primero que pensé fue que se había escapado un preso. Pero cuando llegó mi hija, me dijo que había un incendio. De inmediato recordé la madrugada del 27F: los gritos, los balazos, las cenizas que caían en mi patio. Creo que lo mínimo habría sido que nos avisaran vía escrita lo que ocurriría. Se nota que ninguno de estos “genios” estuvo acá ese día”, relató muy enojada María Eugenia, madre de Belén.
La indignación era generalizada entre quienes viven en torno al penal. Y a tal extremo llegó la desinformación que una conocida radio publicó en Twitter que había una emergencia en la cárcel, lo que fue rápidamente aclarado.
“La verdad es que le avisamos sólo a algunos medios. Pero ésa era la idea, que fuera lo más sorpresivo posible. Es más, ni siquiera el personal de Gendarmería o bomberos sabía, sólo los altos mandos. El procedimiento fue absolutamente regular, no es obligación comunicarlo y es algo que hemos venido desarrollando en varios penales de la región con mucho éxito”, indicó el director regional de Gendarmería, coronel Francisco Melo.
La noche del miércoles las redes sociales -en especial Twitter-, fueron tomadas por quienes rechazaron el operativo. Carlos Arzola, presidente comunal de la DC, criticó duramente el simulacro.
“Lo que hizo el director regional de Gendarmería fue de una torpeza extrema. A nadie se le ocurriría efectuar un simulacro de tsunami en Dichato sin avisar, y en el caso de lo ocurrido en la cárcel, aplica el mismo criterio. La Constitución resguarda la integridad física y psíquica de los ciudadanos, por lo tanto, aquellos vecinos o cualquier persona que se haya sentido afectada por este operativo, puede perfectamente presentar un recurso de protección en la Corte de Apelaciones”, indicó el abogado, quien además, vía Twitter, solicitó la renuncia del director regional de Gendarmería, posteo que de inmediato fue respondido por el concejal Domingo Díaz, quien calificó la frase como “irresponsable”.
“Se obtuvo información útil”
Francisco Melo insistió en que se habría perdido efectividad si se hubiera comunicado el simulacro, el que calificó como exitoso.
“Bomberos acudió en sólo dos minutos y medio; las redes húmedas funcionaron perfectamente y la red seca se encuentra ubicada en un lugar estratégico. También se pudo chequear el acceso de los carros y el tiempo de desalojo, información muy útil para prevenir”, sostuvo el coronel Melo, quien pidió disculpas “si alguien se vio afectado con este simulacro, pero había acá un bien superior”.
La situación ocurrida en la cárcel recuerda lo vivido hace unos años en la antigua Escuela Rosita O´Higgins, donde se realizó un simulacro de incendio sin avisar. Apoderados protestaron indignados, pues muchos de ellos, al conocer la noticia, salieron de sus trabajos y corrieron hasta el plantel. Incluso una mamá presentó angina de pecho.
LA DISCUSIÓN intentó ayer conocer la opinión del gobernador, Eduardo Durán, sin embargo no estuvo disponible.
La Discusión