Bombero que salvó a JM: “Me dijo sáqueme de aquí”
Justo en momentos en que los rumores sobre la salud de Julio Martínez se hacían cada vez más fuertes, un incendio sorprendió al edificio que habita el comentarista.
Era cerca de la una y media de la mañana cuando las llamas empezaron en el segundo piso del inmueble de calle Las Hortensias. Bomberos de Providencia entraron a los departamentos aledaños y en uno de ellos Julio Martínez lucía mal. “Ingresé con dos compañeros y vi a don Julito. No lo podía creer, pero él me calmó, porque yo sólo pensaba en sacarlo rápido. Pero él me tomó las manos y me dijo tranquilo usted que yo estoy bien, tranquilo usted y sáqueme de aquí , pero con una gentileza que me sorpendió”, contó el voluntario héroe de la jornada, pero que prefirió el anonimato..
Las cámaras de celular se multiplicaban buscando al octogenario peridista que estaba acostado en pleno jardín del edificio y Carabineros hablaba de una persona con principio de asfixia.
La escena era dramática: el humo se mantenía insoportable desde el segundo piso y la señora de Martínez, Norma González, se cobijaba a duras penas entre una frazada. Movía la cabeza de un lado a otro, mientras miraba a don Julio y entregaba los datos personales a la policía. Nombre completo y edad lo dijo sin problemas, pero luego se la tragó un nervioso silencio y calló. Los efectivos policiales sólo atinaron a abrazarla y acariciarle el pelo, pero ella les hizo el quite para fijar nuevamente la vista en su marido.
Don Julio permaneció en la camilla cinco, diez minutos, pero la ambulancia no llegaba. Bomberos y carabineros lo rodeaban y no dejaban verlo. Entre las piernas de los policías se podía ver el respirador artificial que a duras penas soportaba Martínez y las grandes manchas café que cubren su envejecido rostro.
Esa misma cara pálida, casi fantasmal fue la que vieron los paramédicos que asistieron a JM. A esa altura, las cámaras de televisión se peleaban las mejores imágenes, mientras la señora Norma , su mujer de toda la vida, evitaba los micrófonos.
A ella se le acercó Magdalena, la auxiliar médico que por más de una década atiende al actual comentarista deportivo de Canal 13. “Senti el humo y corrí para ver cómo estaban mis viejitos. Había que actuar rápido, pero a don Julio se lo están llevando y no se que pasará con él”, comentó la mujer que vive en el departamento 42, justo al frente del que habita.
La ambulancia de Help llegó y la señora Norma sigue mirando con la vista. “¿Qué le puedo decir?, mi viejito ya está bien, sólo pido que a mi viejito no le pase nada. Con los médicos va a estar bien, mijito”.
Recién a las tres y media de la mañana, salió el primer reporte médico. El médico de Help, Claudio Gallardo comentó que el comentarista sufrió“una crisis obstructiva, producto de la inhalación de humo y está con un tratamiento broncodilatador, pero como está saliendo de una neumonía ahora lo llevamos a la Clínica Indisa, pero está conciente”.
Fuente: LUN.COM
Justo en momentos en que los rumores sobre la salud de Julio Martínez se hacían cada vez más fuertes, un incendio sorprendió al edificio que habita el comentarista.
Era cerca de la una y media de la mañana cuando las llamas empezaron en el segundo piso del inmueble de calle Las Hortensias. Bomberos de Providencia entraron a los departamentos aledaños y en uno de ellos Julio Martínez lucía mal. “Ingresé con dos compañeros y vi a don Julito. No lo podía creer, pero él me calmó, porque yo sólo pensaba en sacarlo rápido. Pero él me tomó las manos y me dijo tranquilo usted que yo estoy bien, tranquilo usted y sáqueme de aquí , pero con una gentileza que me sorpendió”, contó el voluntario héroe de la jornada, pero que prefirió el anonimato..
Las cámaras de celular se multiplicaban buscando al octogenario peridista que estaba acostado en pleno jardín del edificio y Carabineros hablaba de una persona con principio de asfixia.
La escena era dramática: el humo se mantenía insoportable desde el segundo piso y la señora de Martínez, Norma González, se cobijaba a duras penas entre una frazada. Movía la cabeza de un lado a otro, mientras miraba a don Julio y entregaba los datos personales a la policía. Nombre completo y edad lo dijo sin problemas, pero luego se la tragó un nervioso silencio y calló. Los efectivos policiales sólo atinaron a abrazarla y acariciarle el pelo, pero ella les hizo el quite para fijar nuevamente la vista en su marido.
Don Julio permaneció en la camilla cinco, diez minutos, pero la ambulancia no llegaba. Bomberos y carabineros lo rodeaban y no dejaban verlo. Entre las piernas de los policías se podía ver el respirador artificial que a duras penas soportaba Martínez y las grandes manchas café que cubren su envejecido rostro.
Esa misma cara pálida, casi fantasmal fue la que vieron los paramédicos que asistieron a JM. A esa altura, las cámaras de televisión se peleaban las mejores imágenes, mientras la señora Norma , su mujer de toda la vida, evitaba los micrófonos.
A ella se le acercó Magdalena, la auxiliar médico que por más de una década atiende al actual comentarista deportivo de Canal 13. “Senti el humo y corrí para ver cómo estaban mis viejitos. Había que actuar rápido, pero a don Julio se lo están llevando y no se que pasará con él”, comentó la mujer que vive en el departamento 42, justo al frente del que habita.
La ambulancia de Help llegó y la señora Norma sigue mirando con la vista. “¿Qué le puedo decir?, mi viejito ya está bien, sólo pido que a mi viejito no le pase nada. Con los médicos va a estar bien, mijito”.
Recién a las tres y media de la mañana, salió el primer reporte médico. El médico de Help, Claudio Gallardo comentó que el comentarista sufrió“una crisis obstructiva, producto de la inhalación de humo y está con un tratamiento broncodilatador, pero como está saliendo de una neumonía ahora lo llevamos a la Clínica Indisa, pero está conciente”.
Fuente: LUN.COM