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Hoy se conmemora el quinto aniversario de muerte del segundo mártir de la Primera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Melipilla, Ramiro Núñez Acuña, quien falleció al salvarle la vida a su compañero, Luis Paredes.
Nacido el 30 de noviembre de 1956, 21 años más tarde, este joven melipillano llegó a tocar las puertas de su querido cuartel para firmar la solicitud de incorporación que finalmente el 4 de octubre fue aprobada.
Destacado por su buen compañerismo y siempre dispuesto a cooperar con sus pares, este hombre casado y con cuatro hijos, de los cuales dos siguieron el ideal bomberil de su padre, siempre se caracterizó por ser un guía para los demás voluntarios, aconsejándolos y escuchándolos en los momentos que se le pedía.
Sin embargo, la tarde del 10 de diciembre del 2005, pasó a convertirse en un día que los primerinos jamás olvidarán.
Un incendio forestal en el cerro Sombrero alertaba a más de 70 voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Melipilla, entre ellos Núñez, quien como en ocasiones anteriores al escuchar la alarma de incendio emprendió rumbo al siniestro declarado a las 12:36 horas y que amenzaba con convertir en cenizas unas viviendas.
Alrededor de las 15:00 horas, el silencioso viento junto al fuego reinante comenzaron a ser protagonistas del evento cambiando la dirección del fuego, haciendo que Ramiro Núñez y Luis Paredes, de sólo 17 años y seis meses en la Institución, se vieran envueltos en llamas sin salida alguna.
El sentido paternal de este hombre de sólo 24 años, hizo que en un acto de completa valentía cubriera con su propio cuerpo al de su compañero de ideal, protegiéndolo de las llamas que a esa altura se encontraban descontroladas.
Tras incesantes minutos de impotencia, otros voluntarios lograron rescatar a estos dos caballeros del fuego, quienes presentaron graves quemaduras que después de 19 días de agonía terminaron con la vida del voluntario Ramiro Núñez, pasando a la historia de los Bomberos de Chile como el segundo mártir del Cuerpo de Bomberos de Melipilla y el número 269 a nivel nacional.
Hoy se conmemora el quinto aniversario de muerte del segundo mártir de la Primera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Melipilla, Ramiro Núñez Acuña, quien falleció al salvarle la vida a su compañero, Luis Paredes.
Nacido el 30 de noviembre de 1956, 21 años más tarde, este joven melipillano llegó a tocar las puertas de su querido cuartel para firmar la solicitud de incorporación que finalmente el 4 de octubre fue aprobada.
Destacado por su buen compañerismo y siempre dispuesto a cooperar con sus pares, este hombre casado y con cuatro hijos, de los cuales dos siguieron el ideal bomberil de su padre, siempre se caracterizó por ser un guía para los demás voluntarios, aconsejándolos y escuchándolos en los momentos que se le pedía.
Sin embargo, la tarde del 10 de diciembre del 2005, pasó a convertirse en un día que los primerinos jamás olvidarán.
Un incendio forestal en el cerro Sombrero alertaba a más de 70 voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Melipilla, entre ellos Núñez, quien como en ocasiones anteriores al escuchar la alarma de incendio emprendió rumbo al siniestro declarado a las 12:36 horas y que amenzaba con convertir en cenizas unas viviendas.
Alrededor de las 15:00 horas, el silencioso viento junto al fuego reinante comenzaron a ser protagonistas del evento cambiando la dirección del fuego, haciendo que Ramiro Núñez y Luis Paredes, de sólo 17 años y seis meses en la Institución, se vieran envueltos en llamas sin salida alguna.
El sentido paternal de este hombre de sólo 24 años, hizo que en un acto de completa valentía cubriera con su propio cuerpo al de su compañero de ideal, protegiéndolo de las llamas que a esa altura se encontraban descontroladas.
Tras incesantes minutos de impotencia, otros voluntarios lograron rescatar a estos dos caballeros del fuego, quienes presentaron graves quemaduras que después de 19 días de agonía terminaron con la vida del voluntario Ramiro Núñez, pasando a la historia de los Bomberos de Chile como el segundo mártir del Cuerpo de Bomberos de Melipilla y el número 269 a nivel nacional.
