A 10 años de la tragedia en el Cerro Renca

Firestorm

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16 Abr 2011
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Una reseña de los hechos que significaron una dura pérdida para el Cuerpo de Bomberos de Santiago (CBS), y en especial, la 21ª. Compañía.

Aquí un relato sobre los duros momentos que vivió la Institución, cuando un accidente enlutó la tarde del viernes 25 de noviembre de 2005:

“Varios Voluntarios de la 21 reunidos en el Cuartel, luego del intenso trabajo que minutos antes se cumplía en un Llamado a pastizales en la ladera sur del Cerro Renca; entre ellos Miguel Morales, Luis Retamal y Juan “el Chico” Encina Espinoza.

Pasadas las 19 horas, nuevamente los timbres avisan de una emergencia, y por la radio se escucha la voz de la Operadora: 10-2, Avenida El Cerro y General Vergara, B-21. La máquina es tripulada por los tres Voluntarios y el Cuartelero N° 2 Camilo Vergara. A cargo, el Bombero Honorario Juan Encina Espinoza.

Nuevamente, el Cerro requería nuestra presencia, pero ninguno de los que tripularon el Carro o los que quedaron en el Cuartel, entre ellos Gonzalo, hijo de “el Chico”, se imaginó lo que en los minutos posteriores iba a ocurrir.

El entonces Director Felix Sarno, junto al Capitán Héctor Moraga y el Ayudante de Administración Moisés Hidalgo, salieron en el vehículo del primero tras la Bomba, mientras que Gonzalo debió quedarse. Las comunicaciones radiales tanto desde la Central de Alarmas como el Cuartel comenzaron a incrementarse, pero nadie contestaba.

Los tres Oficiales apuran su paso y en una de las curvas del camino observan el dantesco espectáculo; ver el carro B-21, aquel Renault M-210 que fue puesto en servicio en 1995 para reemplazar al legendario Camiva Berliet 770KB, convertido en chatarra, con su material desparramado por la ladera sur del cerro y con un saldo del Conductor y tres Bomberos lesionados, uno de ellos de gravedad; precisamente el que iba a cargo.

El Ayudante Hidalgo, desde su radio, confirmaba la información que la Central ya tenía en su poder, al solicitar el despacho de un rescate al lugar de la tragedia, por el desbarrancamiento de la máquina.

El Cuartelero Vergara yacía inconsciente en la ladera, en la parte baja del cerro estaban Luis y un debilitado Juan, el que era socorrido por el Director y Capitán, y en el camino, el Ayudante recibía a Morales, quien a duras penas subió reptando hasta allí, donde pudo ser atendido.

Los Veintiuninos y Voluntarios de las restantes Compañías del Cuerpo, comenzaron a llegar rápidamente al lugar, entre ellos el también entonces Comisario de la Séptima Comisaría de Carabineros de Renca, Mayor Rolando Casanueva De Rosa, quien gestionó la ayuda necesaria para poder evacuar rápidamente a los lesionados, mientras todos los esfuerzos estaban orientados a poder reanimar a Juan, pero el lentamente empezaba a entregar su vida como el Mártir número 42 del CBS, y el primero de la Bomba Renca, lo que fue confirmado cuando el reloj marcaba más allá de las 20 horas.

Al día siguiente, su segunda casa; su amado Cuartel, lo recibía con el lastimero sonido de la “Paila”, que lloraba sus melodías porque uno de sus servidores había caído en acto de servicio y el Cuerpo de Bomberos de Santiago en pleno, encabezado por el Superintendente Cristián Pérez Benítez y el Comandante Marcial Argandoña Galetti, lo custodió en este camino de regreso.

Juan estuvo acompañado en todo momento por Bomberos, Brigadieres Juveniles y amigos de muchos lugares; adornada su capilla ardiente por cientos de flores y escoltada por Guardias de Honor que no paraban de resguardar su persona, alguien que para los integrantes de la Bomba Renca, ya se había llenado de gloria.

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(Fotos: CBS)

El domingo 27 de noviembre, Juan fue trasladado al Cuartel General del Cuerpo, en pleno centro de la capital. Allí fue homenajeado por Voluntarios, Oficiales Generales, de Comandancia, Administración y miembros del Honorable Directorio, hasta la hora del despacho a su último llamado; ese que lo traslada al Cuartel Celestial, flanqueado por los 23 estandartes del CBS, escoltado por su hijo Gonzalo, quien llevaba su Uniforme de Parada en las manos, y Bomberos que junto a sus antorchas, iluminaron el camino hasta el Cementerio General.

Autoridades, familiares, amigos, vecinos y más de tres mil Voluntarios de diferentes Cuerpos de Bomberos, acompañados de sus Carros, se dieron cita en el camposanto para despedir a Juan.

Las palabras para despedir al nuevo Mártir estuvieron a cargo del Director, Felix Sarno, quien con emoción expresó: "Esa Bomba, mi Bomba, se desbarrancó. El material adquirido con tantos años y esfuerzos se esparció por un simple pasto. Y junto a ello, entre las maderas rotas de las escalas, del serpentear de las mangueras sin agua, de entre los pitones, del material de rescate y forestal, entre cotonas y cascos fueron cayendo uno a uno sus tres Voluntarios y su Cuartelero. Uno de ellos, el que iba a cargo; el que sólo unos minutos antes había trabajado activamente en sofocar un incendio forestal; ese Voluntario fue llamado por nuestro mártir Germán Tenderini y a pesar de los esfuerzos que realizaban sus compañeros Veintiuninos que comenzaban a llegar y entre los cuales estaba su hijo, tal vez indisciplinadamente no escuchó los gritos de su Capitán y de sus compañeros, que le obligaban a no entregarse a los brazos del martirologio. No escuchó el llanto de los vecinos que a distancia miraban como aquella ladera era regada de sangre".

Desde ese 25 de noviembre, la 21 supo el significado de tener un símbolo como Juan, quien entregó la vida por su querida Renca, a la cual sirvió por más de veinte años y que hoy recibe el sincero homenaje de todos los hombres y mujeres que sienten el deber moral de continuar su legado, ya sea en cada Sesión, ejercicio o incendio, al pasar la lista o al abrir cuidadosamente el relicario que guarda el uniforme de trabajo con el cual paso a la gloria.

Hoy, Juan es la luz para quienes abrazaron el servicio en el CBS, y en especial de la 21, haciendo carne lo que dice la última estrofa de su himno: “Y si llega el momento supremo, que en la lucha debamos caer; sabemos que lo hacemos por Chile, con Honor, con Valor y Deber. Veintiuno”

Por Moisés Arturo Hidalgo Valenzuela
Voluntario Vigésimo Primera Compañía CBS

Fuente: http://www.cbs.cl/noticias.php?1504-a-10-anos-de-la-tragedia-en-el-cerro-renca
 

elmanguera69

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28 May 2008
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Que lamentable tragedia, y lo más lamentable que poco hemos aprendido en 10 años. Seguimos comprando carros sin ninguna medida de seguridad en sus cabinas y nunca pensamos en que nos puede ocurrir algo tan desgraciado como este accidente.
 
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